Diego es el segundo de los cuatro hijos que Kiko Matamoros tuvo con su primera mujer, Marian Flores, tiene 29 años y es padre de una niña de un año. “Por mi hija lo daría todo, si antes no entendía a mi padre, ahora menos”, cuenta.
“Mi hermana es como una mujer maltratada que busca llegar al corazón de mi padre”
Pero, por encima de todo, Diego Matamoros se vende a esta revista como un hombre herido y cuenta su punto de vista de la historia que desenterró previamente su padre cuando habló de su madre, Marian. “Mi madre ve el 24 horas de GH VIP, Makoke no es la única que lo sigue. Aunque no está siendo un buen trago para ella, de hecho se ofreció a pagarle a Laura la residencia con tal de que no participase en el concurso”, cuenta Diego.
Sale a la luz también, las deudas de su padre con Laura Matamoros. Supuestas facturas del colegio de Laura que todavía no se han pagado. “Cuatro años después, aún quedan 3.000 euros por pagar. Son meses de colegio que mi padre dejó de pagar”, relata en la citada publicación. Pero, sobre todo, “nunca hemos buscado en él lo económico, siempre hemos buscado su amor y mendigado su cariño”.
De hecho, sobre su hermana, la actual concursante en la casa de Guadalix, Diego cuenta que “muestra su dolor porque nunca ha tenido el amor de su padre. Refleja todo ese odio en la figura de Javier, el hijo de Makoke”. Y añade: “Mi hermana es como una mujer maltratada que sigue con su maltratador. Busca alguna forma de llegar al corazón de mi padre para conseguir que la quiera”.
No obstante, cuando se refiere al actual techo de su padre con Makoke, Diego recalca que “en esa casa no hay amor ni una vida buena sino broncas. Ni Laura ni yo envidiamos a Javier”.
Retomando la parte económica, el segundo hijo de Matamoros recuerda lo que le debe su padre a su madre. “Debe parte de junio -150 euros- y 750 de diciembre y justo antes mi madre le denunció porque le debía tres meses y pagó dos”, y afirma que “es absurdo que tenga gastos fijos de 8.000 euros mensuales y deba 150 euros de un mes.
En guerra con Makoke: “Sus mentiras son tan graves que si las dijera en un medio público, iría a la cárcel”
El último episodio que ha vivido Diego con Makoke fue el pasado domingo en GH VIP, donde él la llamó sinvergüenza para pedir perdón acto seguido “porque me hierve la sangre”. En Lecturas, el hijo de Matamoros afirma que “Makoke no tiene vergüenza de mirarme a la cara por haber hecho lo que ha hecho conmigo, cosas muy feas y denunciables”. Habla de unas grabaciones “donde quiere destrozar con mentiras”. “No me tiene miedo, lo que tiene es vergüenza de mirarme a la cara”, añade.
Pero, ¿qué cosas ha dicho Makoke de los hijos de su pareja? “Que haya gente que piense que he robado sería una pequeñez comparado con las barbaridades que Makoke ha contado sobre mí, es tan grave que si lo soltase en un medio público, estaría en la cárcel”. Y justifica: “Empezó a llamar a periodistas para ponerlos contra mí, ese es su juego”.
Sobre Makoke termina diciendo: “Por sus hijos lucha y mata pero a los demás los quiere lejos”.
“Mi madre lo es todo”
Muy diferentes son las palabras de constante cariño que le prodiga a su madre. “Mi madre no es una persona fría, siente, padece y quiere. Es una persona luchadora, nos ha sacado adelante, nos besa, se preocupa. Lo es todo”, cuenta.
“Ella ha dejado de comer para alimentarnos a nosotros y ha tenido que ir a Cáritas y a mi padre le dio igual. Mi madre era la que se iba a trabajar todos los días a RTVE, la que le traía el pan a casa a mi padre, pero él abusó de su amor y de su dinero”, añade.
“Mi padre no pagaba a mi madre porque se declaraba insolvente al cobrar de una sociedad que no estaba a su nombre”
Y es que, en los años de penurias económicas de Marian Flores, Diego justifica: “Kiko tiene deudas con nosotros que han prescrito, tengo una de 87.000 euros, otra de 12.000 y otra de 20.000 y muchos de estos impagos ya no se pueden reclamar”.
¿Cómo se justifican estos impagos? “Mi madre le decía al juez que Kiko trabajaba en televisión todos los días pero era imposible cobrar porque mi padre cobraba mediante una sociedad, no a su nombre, esos ingresos no aparecían en ningún lado y él legalmente se declaraba insolvente”, cuenta.
En una entrevista de 14 páginas, Diego Matamoros continúa explayándose largo y tendido. “Javier Tudela me da pena, él sabe que está concursando pero no sabe que el juego lo está dirigiendo mi padre. Está haciendo caja con todo esto y uno de los más perjudicados es Javier”. Sobre la hermana de Tudela y única hija que tienen en común Kiko Matamoros y Makoke, Diego cuenta: “No tengo ninguna relación con Ana, no la considero mi hermana, considero más hermano a Javier sin serlo. Ana es como Makoke pero con 16 años”.
Y concluye: “Mi padre no se ha interesado en la vida de mi hermana pequeña, Irene, tiene 17 años, es muy aplicada y no ha visto a su padre más que cuatro veces en su vida”.
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