Los recién casados han decidido pasar parte de su luna de miel en la playa de Pas de S’Illa, en el Puerto de San Miguel, según ha publicado ABC. José Antonio Wert y Montserrat Gomendio bajaron a la playa con las toallas del hotel y descansaron en una hamaca y sombrilla alquiladas como unos veraneantes más. La pareja logró pasar desapercibida durante unas horas hasta que algunos de los bañistas se acercaron y finalmente terminaron marchándose cuando se percataron de la presencia de los paparazzi.
Las imágenes del ex ministro de Educación y Cultura y la ex secretaria de Estado del mismo ministerio eran de las más buscadas después de que se casaran el pasado 11 de julio y no trascendiera ninguna foto del enlace. Una boda que estuvo rodeada de polémica por diferentes motivos. Primero, por la mala o escasa relación que existe entre Wert y sus hijos por el convenio regulador y segundo, porque varios políticos declinaron la invitación, debido a que algunos ven a Gomendio como una manipuladora y no les cae nada bien, según publicó La Razón. A ello hay que sumarle que el lugar elegido para el evento es una finca ilegal ya que se encuentra precintada y tiene una orden de “cese de actividad”. A pesar de ello, la pareja se decantó por La Camarga debido a la dificultad que existe para captar instantáneas, ya que está rodeada de encinas, y a sus fuertes medidas de seguridad, que imposibilitaron aún más el trabajo de los fotógrafos.
Wert y Gomendio pretenden iniciar una nueva etapa juntos en París, de ahí la premura de su boda. Gomendio fichó hace pocas semanas como directora general adjunta de Educación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), y el exministro le pidió a Rajoy ser embajador de España ante la OCDE en París. Así que seguramente pronto comiencen su traslado a la ciudad del amor y lejos de la atención mediática.
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