Los memes han colonizado la política. El PSOE ha compartido en su cuenta de Twitter el Más sabe el Perro Sanxe por perro que por Sanxe y el domingo va a ganar la derecha por el Que te vote Txapote, un lema pegadizo que soltó un desquiciado en TVE cuando le iban a preguntar por un radar móvil. Perro Sanxe ha cancelado su entrevista con Susana Griso tras ver que Feijóo se lesionó levantándose de la silla y no le quedó más remedio que cancelar la campaña y su participación en el debate. Ha preferido el sillón masaje de TVE, porque es perro viejo Perro Sanxe.
Alguien ha debido decirle por el pinganillo a Feijóo que como siga hablando es capaz de dejar al PP sin grupo parlamentario. Hoy ha reconocido que sabía que Marcial Dorado era contrabandista y si pasan dos semanas más termina diciendo que descargaba él mismo los fardos de coca en la Ría de Arousa. El debate fue raro, por un lado Abascal soltando su soflama España-ETA-Venezuela-Blas de Lezo y por ser el primer debate en el que dos rivales juegan en equipo.
El otro duelo del fin de semana es el de Barbie contra Oppenheimer, dos de las películas más esperadas del año que además se estrenan el mismo día y que han creado una especie de crossover de rivalidad pero también de promoción mutua. Barbie ya ha lanzado su producto en Japón y Oppenheimer también lanzó el suyo hace 80 años, así que por lo que sea, a los japoneses no les ha hecho gracia la película de Nolan. Es curioso que la campaña de márketing de Barbie, el juguete de niñas por excelencia, haya consistido en pintar la mitad del planeta de rosa chicle. Eso en un mundo plagado de observatorios de igualdad elaborando informes sobre cómo los juguetes y los colores cosifican y oprimen a los géneros. Y eso que por la alfombra rosa ha pasado media España.
Los hashtags del Tuitopía de esta semana son #PerroSanxe, #ElNarcoDelBarco, #23J y #Barbenheimer.
