Es una realidad apoyada por datos. De tres años de descensos continuados de las matriculaciones en la asignatura de religión a aumentar entre un 6% y un 10% en muchas comunidades autónomas (País Vasco, Galicia,...) El número de alumnos que cursan religión en España aumenta y no es por vocación, precisamente.
Los alumnos prefieren el temario más asequible de Religión que el de otras asignaturas específicas optativas
El aumento se debe, sobre todo, al Bachillerato. Según los propios datos de la Conferencia Episcopal el número de estudiantes de 1º de bachillerato de la enseñanza pública que cursan la asignatura de Religión católica se han duplicado en los dos últimos cursos.
En 2° de Bachillerato muchos alumnos tendrán que elegir entre esta asignatura o esta otra. Cuentan igual ambas para la nota. Adivinen. pic.twitter.com/dvbvqlzAlS
— Lola Morales (@lolamenting) July 23, 2017
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Todo es un movimiento perfectamente orquestado. La denominada ley Wert se aprobó en 2013 pero no fue hasta 2015 cuando entró en vigor en los cursos de Bachillerato, justo el año en donde las cifras de religión abandonaron el periodo de caídas. Ahora la nota media cuenta para el expediente académico y los alumnos no son tontos, buscan los atajos para obtener mejores notas.
"Yo misma tenía una alumna musulmana matriculada en religión este año en mi tutoría. Pero es que nadie va a controlar nada de eso, así de claro. Nosotros lo tenemos asumido. Por quienes más lo lamento es por esos alumnos de bachillerato que intentan formarse mejor pero a cambio bajan su media con respecto a los otros", nos cuenta Lola Morales, profesora de matemáticas con 12 años de experiencia en 4 institutos públicos distintos.
Y es que lo de las notas no entiende ni de ideologías ni de religiones. Los alumnos eligen el camino más fácil para engordar el expediente y ya puedes ser musulmán o budista que si en religión regalan más dieces vas de cabeza:
IES de Vallecas: 28 alumnos de un grupo de 30 escogen Religión (católica) como materia para 1º de Bachillerato. Incluido algún musulmán.
— José Almeida (@jago2019jose) June 24, 2017
La LOMCE no ha fracasado del todo:que la "Religión" cuente para la media de Bachillerato es un disparate. Sí. Pero un disparate premeditado.
— José Almeida (@jago2019jose) June 24, 2017
En su momento hice cuentas (quizás me equivoqué):Religión en 1º y 2º de Bachillerato podría suponer hasta un 11,1% de la nota media de Bach.
— José Almeida (@jago2019jose) June 24, 2017
¿Estamos de acuerdo en q la materia de Religión decida el futuro universitario de los alumnos con esos contenidos y criterios de evaluación?
— José Almeida (@jago2019jose) June 24, 2017
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Según la LOMCE los alumnos de Bachillerato tienen que elegir entre una serie de asignaturas específicas para completar la modalidad de bachillerato escogida. Los centros y las administraciones educativas pueden fijar su oferta. Dependiendo de la comunidad autónoma (con competencias) la Religión Católica es una oferta obligatoria o no. En La Comunidad de Madrid, por ejemplo, es de oferta obligatoria en primero de Bachillerato y, hace apenas unos días, los sindicatos han denunciado que el gobierno pretende hacerla obligatoria este curso también en segundo.
En Ceuta y Melilla, por ejemplo, es distinto:
"En Melilla bastante más del 50 % del alumnado es musulmán (en casi ningún caso inmigrantes, sino de españoles, nacidos en Melilla) Así que cada vez menos alumnos eligen la materia de Religión. Aquí no he visto ningún alumno musulmán que escoja Religión nunca [...] En mi centro se ofrecía en 1.º de bachillerato, y el equipo directivo (del que formo parte) decidió dejar de hacerlo. Pero creo que por ejemplo en Madrid acaban de aprobar que sea de oferta obligatoria incluso en 2.º", nos cuenta Elías Gómez, profesor en un centro de esa Comunidad.
El agravio comparativo no se produce solo en el temario, un programa que en el resto de asignaturas controla el Ministerio a rajatabla y que en Religión lo hace la Conferencia Episcopal o los curas de cada centro a su manera. "Los profes de Religión (curioso) suelen ser cinéfilos. Es la única explicación posible (¿no?) a su obsesión por poner películas a sus alumnos", dice José Almeida. En algunas comunidades la asignatura de religión solo se imparte una hora a la semana pero cuenta igual para la nota que las 4 horas de Matemáticas, un caramelo que los alumnos no van a rechazar.
"Todos los alumnos a los que he preguntado dicen que es más fácil y que da igual si creen o no en Dios. Y lo es. Lo es sobre todo porque el resto de profesores (por ejemplo, el de Tecnología industrial) tienen que evaluar de forma seria a sus alumnos y en Religión hay manga ancha porque a ver quién se mete en las cabezas y creencias de cada uno, por mucho que haya un currículo estipulado por ley. Todavía no he visto a un profesor de religión que suspenda a nadie, así que imagínate. En general, todas las notas de religión son 8, 9 o 10. Incluso las de alumnos que llevan meses sin estar en el centro (que cosas así también he visto). Tecnología industrial es difícil. De hecho, antes de la LOMCE era asignatura de modalidad, no optativa.", nos cuenta Lola Morales.
Dentro de los criterios de evaluación a los que se enfrentan los alumnos que eligen religión hay una serie de 'reconocimientos obligatorios' que exige la asignatura a través de los manuales de la Conferencia Episcopal. Entre ellos los alumnos deben "Reconocer con asombro el origen divino del cosmos y distinguir que no proviene del caos o el azar" (a pesar de lo que diga el Papa) o "Dar razón de la raíz divina de la dignidad humana", entre otras. Todo ello fuera de la inspección educativa de contenidos a la que sí están sometidas y vigiladas el resto de asignaturas.
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