España no puede albergar el Mundial del 2030 porque tres aficionados de la cuarta fila de la tribuna de Mestalla llamaron negro a Vinícius. Es la afirmación que ha hecho el delantero del Real Madrid, que hace literalmente tres años llegaba al Mundial de Qatar haciendo el saludo surfero. Qatar es una dictadura extremista islámica que decapita a homosexuales públicamente y en el que, según Amnistía Internacional, murieron 6.500 trabajadores bengalís y nepalís en los preparativos del Mundial. Como en la construcción de las pirámides de Egipto, pero en pleno siglo XXI y con Coca-Cola de sponsor. Haciendo cálculos, tenían que subir a los nepalís al andamio sin arnés porque le salía más caro el arnés que un Nepalí nuevo, pero desde luego nada que ver con el irrespirable ambiente opresor que se respira en España en 2024.
No es el único que se queja y por algo será. Shakira ha reconocido que Hacienda la multó por ser mujer, que si se llamase por ejemplo ‘Xabi Alonso’ o ‘Imanol Arias’ no la habrían investigado. La colombiana es uno de los pocos apoyos que le quedan a Vinícius, han salido hasta diputados de Sumar a negar que España sea racista. Marca ha sacado en portada una foto de Carvajal mandando callar y contradiciendo a su compañero, eso sí, con unas declaraciones descontextualizadas y una foto de hace un mes.
Por supuesto que en España hay racismo, lo que no quiere decir que España sea racista. Internet está lleno de mensajes racistas como está lleno de porno raro y yo no doy por hecho que a los españoles os vaya el hentai. Vinícius ha sido el TT de la semana pero no el único. Pedro Sánchez le ha declarado la guerra a los Lamborghinis como símbolo de la desigualdad social. Lamborghinis en España deben tener Vinícius y cuatro niños rata de YouTube que no sobrevivirían tres días sin alguien que les preparase el vaso de leche con galletas. Ojo con quitarle el Lambo a Vini que esta vez sí que os quedáis sin Mundial.
En X se ha hablado esta semana del racismo, los Lambos, Oasis y la vuelta al cole.
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