Obligatoria para todos los vehículos una vez cumplen cuatro años desde la primera matriculación, turismos y motocicletas se enfrentan desde hoy a una nueva ITV marcada por los casos de falseo de emisiones detectados en los últimos dos años principalmente en modelos del grupo Volkswagen, pero también en otros grandes fabricantes, algunos todavía en fase de investigación.
Una prueba que deberán pasar cada dos años tanto motocicletas como turismos, aunque estos últimos, una vez alcancen los 10 años de edad, deberán pasarla anualmente. ¿Y si nos la saltamos? Pues la multa asciende ya a 200 euros. Una vez pasada, el resultado desde ahora sólo podrá ser favorable, desfavorable o negativa. En estos últimos casos tendremos diez días para solucionar los fallos detectados y volver a pasarla. Si ha sido negativa, es decir se han detectado fallos que suponen un grave peligro para la circulación, la sanción ascenderá si circulamos con el vehículo de 500 euros y será además precintado.
Nuevos controles, ¿mayor precio?
Uno de los principales cambios, sin duda el más mediático, es la posibilidad de realizar diversas comprobaciones a través de la centralita electrónica del vehículo, eso sí, sólo en modelos más o menos modernos que estén ya en normativa Euro 5 y Euro 6. En el caso de las emisiones, se seguirán midiendo los valores a través de la salida del escape, pero la nueva herramienta permitirá descubrir fallos relacionados con posibles manipulaciones. De momento, eso sí, sólo se realizarán a modo de prueba hasta el próximo 10 de septiembre. Las mediciones, sin embargo, no incluirán nuevos gases ni el NOx responsable del fraude del 'dieselgate' y una de las emisiones más peligrosas que emiten los motores de gasóleo.
Lo que no cambia es variabilidad en los precios de la ITV según donde la realicemos, pues se seguirá fijando de forma diferente en cada CCAA dependiendo del régimen de mercado establecido. En aquellas con mercado liberalizado, cada operador decidirá si las nuevas pruebas afectan a su tiempo de inspección y si, en consecuencia, consideran oportuno modificar sus tarifas. En CCAA con régimen concesional, o autorización con precios fijados, la decisión está en manos de aquellas. Como dato, pasar la ITV a un turismo diésel en Navarra supone 33,90 euros, mientras que hacerlo en Madrid sube hasta 56,50. Para buscar una mayor calidad en el proceso de la revisión técnica, los inspectores tienen que ser técnicos superiores o de un grado inferior pero con tres años de experiencia. Tendrán, además, que actualizar su formación cada tres años.
Otra de las modificaciones es la posibilidad de llevar el coche a otra ITV cuando la primera haya sido desfavorable, no para hacer un nuevo examen, sino para que el nuevo centro compruebe que hemos realizado las reparaciones exigidas en la estación original. Y siempre que sea desfavorable, no negativa, porque en este caso, el vehículo sólo se puede mover en grúa. Se introduce la posibilidad de pasar el examen un mes antes de la fecha de vencimiento, pero manteniendo la fecha de cara a la siguiente revisión. En lo que a los vehículos históricos se refiere, pasarán a serlo ahora cuando cumplan 30 años frente a los 25 que se requería hasta ahora.
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