La oferta de neumáticos para motocicletas es casi más compleja que en el mundo del automóvil. Incluso dentro de una propia marca, como es el caso del gigante francés Michelin, las opciones para un mismo modelo de moto son enormes. De hecho, sólo dentro de su nueva gama de neumáticos deportivos encontramos hasta cuatro posibles modelos, desde una orientación más de carretera hasta neumáticos 100% destinados al circuito. Hemos podido probar el primero de ellos, un Power 5 con la última tecnología de competición de la marca enfocado a ofrecer las mejores prestaciones en carretera abierta.
Un desarrollo continuo para el que la multinacional francesa destina anualmente cerca de 700 millones de euros en investigación y desarrollo y que ha dado ahora lugar a la llegada de esta nueva generación de neumáticos, con las mejores tecnologías procedentes de la competición y el objetivo de desarrollar compuestos en las gomas y diseños de carcasa específicos para cada uno de sus nuevos cuatro neumáticos de la familia Power. Aunque cada versión recurre a un diseño propio y diseñado para cada tipo de utilización, todos destacan por ofrecer la máxima adherencia y por un diseño deportivo que salta a la vista gracias a la tecnología Premium Touch que permite realzar el marcaje en los flancos.
Así, la nueva gama Michelin Power se compone de un total de cuatro modelos que van desde el Power 5 100% para carretera que hemos podido probar de forma intensiva hasta el slick de competición de altas prestaciones denominado Power Slick². Entre ambos, el Michelin Power GP que combina uso en carretera y circuito y el Power Cup² diseñado para circuito pero homologado para carretera.
Power 5, mucho agarre, mucha confianza
Montados en una Honda VFR, un modelo con el que puedes viajar con alto grado de confort y dinamismo o disfrutar de una larga sesión de curvas en puertos de montaña, hemos cubierto más de mil kilómetros en todo tipo de trazados, incluso pasando por fases de lluvia que nos ha permitido comprobar la seguridad que transmiten en condiciones de baja adherencia.
Tras un breve periodo de adaptación enseguida descubres que el diseño del neumático delantero permite sobre todo una ágil entrada en curva con mínima insinuación sobre el manillar. Se siente mucho agarre sobre el asfalto fruto de una serie de soluciones en su desarrollo como un innovador compuesto que incorpora sílice y negro de carbono, la tecnología bi-compuesto 2CT así como la ya mencionada tecnología Premiun Touch para los flancos.
Todo ello en busca de una elevada durabilidad de las gomas, mucho agarre en el apoyo en curva y en el momento de fuertes frenadas a la entrada así como una tracción eficiente en el momento de acelerar sintiendo que la rueda trasera mantiene la trazada sin ponernos en apuros al abrir gas con decisión. Al menos lo hace así con los 100 CV que le llegan, pero se siente que está preparado para mayores dosis aun de potencia. En la apenas media hora que rodamos por carreteras mojadas también destaca el agarre que ofrece y la buena capacidad para evacuar el agua, transmitiendo suficiente confianza como para seguir disfrutando de la conducción, a otro ritmo lógicamente, pero sin necesidad de ir “parados”.
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