Parafraseando 'Amanece que no es poco', la incorporación de Pablo Iglesias a la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos de Inteligencia supone que 'La Casa' ha perdido las elecciones.
Siempre fue uno de sus objetivos. El líder comunista ansiaba controlar los servicios de inteligencia españoles y lo ha conseguido. Por eso el general Ballesteros no ha sido nombrado director. Siendo un asunto grave, trataremos de lo que supone que Iglesias, si Sánchez no cambia en el último momento, forme parte del grupo gubernamental que supervisa al CNI. Dicho en román paladino, los morados tendrán acceso libre a todos los secretos de estado. De no poder dormir al pensar en un gobierno con Podemos, Sánchez les ha entregado la caja de seguridad.
Es una inclusión forzadísima, porque las responsabilidades que detenta Iglesias en el gobierno no justifican un asiento en dicha Comisión, integrada por los ministros de Defensa, Interior, Economía y Exteriores, el director del Gabinete de la Presidencia, el Secretario de Estado para la Seguridad, el director del CNI y el vicepresidente del gobierno. Que de manera específica pueda añadirse a este o aquel ministro, es circunstancial.
De no poder dormir al pensar en un gobierno con Podemos, Sánchez les ha entregado la caja de seguridad"
Iglesias no estará en calidad de vicepresidente para presidir la comisión, cosa reservada para Calvo o Robles. Entonces, ¿qué sentido tiene su presencia? ¿Qué puede aportar en la elaboración de la Directiva de Inteligencia, calificada como alto secreto? ¿Es imparcial a la hora de tratar asuntos relacionados con Venezuela, como el caso Ábalos y las cuarenta maletas fantasma, o controlar la red del SEBIN, Servicio de Inteligencia Bolivariana, cada vez más extendida en España? ¿Y cuándo se trate del separatismo? ¿Sus opiniones acerca de las mezquitas salafistas en España – el lugar de Europa donde mayor concentración hay – o los servicios iraníes y su implantación en núcleos preferentemente universitarios tendrán relevancia? ¿Sabrá facilitar líneas de trabajo acerca de las estrechas relaciones entre el Servicio Federal de Seguridad Ruso en el movimiento separatista?
A los norteamericanos les parece que no, y han decidido excluirnos del flujo habitual de información entre países aliados. No son los únicos. El BND alemán expresa dudas, el MI5 reducirá a la mínima expresión las relaciones entre su antena de Madrid y la Casa, los Renseignements franceses califican a los servicios españoles como sospechosos; y del Mossad ni les cuento, sabiendo de la fobia que los 'podemitas' sienten hacia Israel. España queda así fuera de la comunidad de inteligencia occidental. Somos NF, NoForeign, calificación otorgada en inteligencia a países que no deben tener acceso a informaciones sensibles. Veremos en qué queda esto respecto a nuestra participación en la NATO.
Nada que ver con aquellos tiempos en los que el CESID era el primer servicio del mundo en informar del golpe para derribar a Gorbachov, tiempos en los que los agentes de campo españoles sabían antes que sus colegas de la CIA-DIA o del SDCE francés lo que planeaba Hamás en territorio europeo o, gracias al general Emilio Alonso Manglano y aprovechando la conferencia de paz de Madrid, una delegación de la inteligencia egipcia pudo reunirse con la israelí y llegar a acuerdos.
Ahora somos unos apestados y nuestros socios en materia de información van a ser Bolivia, Venezuela, México, Irán o la Rusia de Putin"
Ahora somos unos apestados y nuestros socios en materia de información van a ser Bolivia, Venezuela, México, Irán o la Rusia de Putin, países que nada tienen que ver con nuestro entorno político o económico. Los primeros síntomas de lo que representa eso para la defensa de nuestro país los tenemos en la ampliación de aguas territoriales por parte de Marruecos o que Argelia haya hecho suyas las que rodean la isla de Cabrera. He aquí el sentido del estado de Sánchez. He aquí el siniestro porvenir que se nos presenta. Si no se repara, pronto veremos a Cataluña y Euskadi autodeterminándose, la cesión de Ceuta y Melilla a los marroquíes, la 'bolivarización' de nuestra inteligencia y el desprecio de todo occidente. Y con nuestra inteligencia paralizada, como cuando lo separatas agreden a un periodista en la Meridiana ante la impasible mirada de los Mossos, que no mueven ni un músculo para defenderlo.
Lo malo de que el CNI perdiese las elecciones es que, a diferencia de la película de Cuerda, en las que ganaba la secreta en detrimento de la Guardia Civil, radica en que en el film decían “Tranquilos, la secreta somos nosotros mismos”. Aquí no. Aquí son otros muy distintos los que han ganado.