Debemos comenzar por citar, como precedente próximo, el de la Opa del BBVA sobre el Banco de Sabadell. Nada más anunciarse, el Gobierno salió en tromba para oponerse a la operación, sin sujeción a procedimiento legal alguno y sin que existiera ninguno de los informes oficiales preceptivos. Así, en la fusión de Bankia, S.A. con CaixaBank, S.A. consta en el expediente administrativo que "ello por cuanto cabe apreciar que los referidos informes son determinantes para la resolución del procedimiento, en tanto que permiten al órgano administrativo formarse un juicio de valor recto, riguroso y cierto, sobre el fondo del asunto…".
Las actuales "formas" no son las que se esperan en la Unión Europea, desde el respeto al principio a la libertad de empresa y a la libre circulación de capitales. Ahora, el Banco de España acaba de elevar informe al Banco Central Europeo favorable a dicha OPA, al considerar que la misma no crea un problema para la estabilidad financiera, porque la solvencia y liquidez del nuevo grupo están garantizados.
En la OPA sobre Talgo, debe recordarse que ya en el mes de marzo, antes de que el consorcio Ganz-Mavag, liderado por Magyar Vagon, presentara formalmente la solicitud de OPA, el Gobierno español, a través de su ministro de Transportes, se había opuesto frontalmente a la operación ("Puente oficializa la oposición del Gobierno a la compra de Talgo por la húngara Magyar Vagon. El ministro de Transportes asegura que el Ejecutivo hará "todo lo posible" para evitar que el grupo de András Tombor, al que se vincula con intereses rusos, adquiera el fabricante de trenes").
Otra vez sin fundamento alguno, más allá del político, pues debe tenerse en cuenta que el Informe desfavorable de la Junta de Inversiones Exteriores es de fecha muy posterior, de 26 de agosto de 2024, según consta en el Acuerdo del Consejo de Ministros de 27 de agosto de 2024, "por el que se resuelve la solicitud de autorización de la inversión extranjera de Ganz-Mavag Europe Private Limited Company en la sociedad española Talgo S.A", publicado en la web de la CNMV.
Dos días después de que el Gobierno español oficializara (27/08/2024) la oposición a la OPA de Ganz-Mavag Europe Private Limited Company sobre la sociedad española Talgo S.A., la prensa española recogió de forma similar las declaraciones de portavoces de la Comisión Europea en la que manifiestan que la Comisión "avala el veto del Gobierno a la OPA húngara sobre Talgo".
Indefensión
Declaraciones oficiales que inducen a confusión y sin sustento documental alguno. Ha de tenerse en cuenta que la entidad oferente ha manifestado a la CNMV que "la decisión del Consejo de Ministros
notificada carece de la más mínima motivación y produce al Oferente la más absoluta indefensión", anunciado que la recurrirá ante el Tribunal Supremo y ante las instancias de la Unión Europea, que, como vemos, acaban de manifestarse sin el más mínimo rigor.
Las consecuencias inmediatas de la decisión gubernamental han sido, principalmente y ante "la incertidumbre que la mencionada decisión plantea", el desistimiento de la oferta pública de adquisición, sin perjuicio de, en función de las circunstancias, "volver a la carga", lo cual no estaría exento de obstáculos, dado el desahucio que se acaba de producir. Y la aparición en escena, de forma inmediata y con apoyos gubernamentales explícitos de otros actores europeos ("El Gobierno checo respalda la fusión de Skoda y Talgo para crear un "campeón europeo").
Es necesario y perentorio que tanto por el Gobierno como por la Comisión Europea se respeten los procedimientos y no se realicen declaraciones arbitrarias. Están en juego las libertades fundamentales de la Unión Europea. Y se requiere, ante todo, transparencia.
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