Opinión

El derecho de pernada de Irene Montero

Entiendo que la carrera política de Irene Montero

  • La ministra de Igualdad y secretaria de Acción de Gobierno, Irene Montero -

Entiendo que la carrera política de Irene Montero está acabada hace tiempo y es lógico que intente agarrarse a un clavo ardiendo, igual que una hiena es incapaz de soltar una presa jugosa que ni siquiera ha tenido que cazar ella, pero lo que no consigo comprender es por qué elige clavos oxidados.

Después de tenernos una semana intentando hacernos tragar con embudo que un piquito solicitado y aceptado es una agresión sexual, ahora que el barco de Jenny se hunde, cosa que no consiguió ni en el cine Forrest Gump, no se le ocurre otra cosa que arremeter contra Ayuso. Acusa a la presidenta de la Comunidad de Madrid de ser partidaria de retrotraernos a la Edad Media, para quitarnos a las mujeres el derecho a votar o a abrir una cuenta bancaria, mientras devuelve a los señores feudales el derecho de pernada.

Por un lado, es curioso que ya no se conforme con soltar bulos de nuestra época actual, sino que trate, además, de colarnos bulos del medievo. No sé si el problema es que no ha leído libros de historia, muchos o ninguno, o si es plenamente consciente de que son sus votantes los que no leen, ya que hay cientos de escritos que desmienten el derecho de pernada como una realidad, al menos, en nuestro país.

Habla esta mujer desde su púlpito disfrazado de feminismo, perteneciendo a un partido que ha hecho un ERE con el que se ha quitado de en medio a casi todas las mujeres, dejando un 80% de varones

Por otro lado, y este es el más divertido, tiene guasa que precisamente ella saque el tema de la imposición del derecho de pernada. Una cosa le tenemos que reconocer a esta mujer: tiene más moral que el Alcoyano, cuando es de dominio popular que la señorita, virgen, pura y casta o no, que tuviera la aspiración de ser algo en Podemos, es más que probable que haya tenido que pasar por la piedra de ciertos señores feudales del partido, empezando por ella misma.

Habla esta mujer desde su púlpito disfrazado de feminismo, perteneciendo a un partido que ha hecho un ERE con el que se ha quitado de en medio a casi todas las mujeres, dejando un 80% de varones. Ha tenido que ser Podemos el que nos enseñe que los ERES pueden ser machistas. Pero no pasa nada, Irene, mañana ponéis un cartel que diga "Unidas Podemos” y nos plantáis delante a tres señores con barba, pelos largos y camisas remangadas, mientras las cuatro pagadoras del impuesto feudal que habéis quedado les aplaudís a rabiar.

Otro clavo oxidado al que se agarra doña Irene: proclama orgullosa que este verano nos ha dejado con la mayor cifra de mujeres asesinadas por violencia machista.

Si a pesar de que cada vez se da más y más dinero para hacer estas políticas tan feministas, hay más mujeres asesinadas, agredidas y violadas, esto no funciona

Voy a obviar esa parte en la que a estas falsas feministas no les interesa confirmar si realmente el motivo de esos asesinatos es el machismo o si tal vez la causa se encuentra en un trastorno, una enfermedad mental o una adicción, como a las drogas o al alcohol, ya que si se investigaran las causas de todo lo que ellas catalogan como violencia machista, no me cabe duda de que se les vendrían las cifras abajo y tal vez nos sorprenderíamos, al conocer los crímenes que verdaderamente se comenten por puro y duro machismo. Prefiero centrarme únicamente en los datos. Unos datos que nos dicen que la violencia hacia las mujeres es cada vez mayor, cosa que la señorita Montero ve como una oportunidad para demostrar que su presencia y trabajo son necesarios.

El caso es que cualquiera con dos dedos de frente y una calculadora puede comprender que, si a pesar de que cada vez se da más y más dinero para hacer estas políticas tan feministas, hay más mujeres asesinadas, agredidas y violadas, esto no funciona. El Ministerio de Igualdad es el invento más nefasto y caro de la política actual y el trabajo de la señora Montero no es que sea prescindible, es que es incluso condenable, al menos, moralmente.

Quién iba a imaginar que hacer una ley, cuya única novedad era conseguir reducir las penas y poner en la calle a violadores y agresores sexuales, no iba a conseguir que se deje de asesinar y de violar a las mujeres

Quién podía imaginar que gastar 500 millones de euros para combatir el machismo y los asesinatos de mujeres no iba a funcionar, si se gastaba en cosas tan útiles como un anuncio en televisión para mostrarnos que las mujeres podemos tener sexo con el periodo; un estudio sobre que el color rosa nos oprime; un cartel con derechos de imagen robados a influencers femeninas, para demostrarnos que los cuerpos de las mujeres gordas y peludas son estupendos y tienen derecho a ir a la playa, pero no así en el caso de que les falten los dos pechos o una pierna; otro anuncio señalando como machistas a hombres con cierta relevancia, fuera del ámbito político, como periodistas o youtubers... Y lo mejor de todo: quién iba a imaginar que hacer una ley, cuya única novedad era conseguir reducir las penas y poner en la calle a violadores y agresores sexuales, no iba a conseguir que se deje de asesinar y de violar a las mujeres. Pero no se cansan de repetir que su mayor logro ha sido poner el consentimiento en el centro. Debe ser que, a pesar de constar ya explicítamente en nuestras leyes, teníamos el consentimiento en una esquina del salón.

Irene, Pam y todo el club de amiguitas chungas: dejadlo ya, por favor, que nos estáis arruinando la vida a todas. Que no por decir que sois una panda de ineptas que se está enriqueciendo a costa de la vida y la dignidad de las mujeres, soy machista ni fascista. Lo que soy es lista.

Sororidad, hermanas, incluso para las mujeres que no aplaudimos unos resultados vergonzosos, para las que no os votan, para las que os sacan los colores, incluso para las que consiguen que en Madrid no tengáis representación, como Ayuso. No se puede ser feminista solo con las mujeres que te gustan, Irene, pero cómo lo vas a saber, si no tienes ni idea de lo que es el feminismo.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli