En el sistema constitucional español, el ganador de las elecciones es el partido que es capaz de formar gobierno. Ahora mismo, parece harto improbable que el Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo sea capaz de hacerlo, así que me temo que la derecha ha perdido.
Creo que es muy importante recalcar este detalle, porque tras el 23-J, un amplio sector de los medios conservadores, así como muchos políticos del PP y Vox, están actuando como si las elecciones nunca hubieran sucedido. A pesar de la derrota en las urnas, están repitiendo exactamente las mismas consignas sobre Txapote, el fugado de Waterloo, los separatistas, el comunismo y demás estridencias que no han servido para desalojar a Pedro Sánchez de la Moncloa. Tras cuatro años de asedio mediático y político con esta clase de mensajes, es obvio que no han funcionado. La derecha ha perdido. Es hora de cambiar de estrategia.
El detalle más importante de los resultados electorales es que los partidos de derechas sacaron más votos y escaños que los partidos de izquierdas, pero aún así no van a poder formar gobierno. PP y Vox suman 169 escaños, una cifra que les deja muy cerca de la mayoría absoluta. En el hemiciclo hay cuatro partidos conservadores con los que podrían intentar acuerdos, PNV, Coalición Canaria, UPN y Junts. Estas cuatro formaciones suman catorce diputados una cifra más que suficiente para poder gobernar. De hecho, ni siquiera necesitan a todos los partidos de esa lista.
El problema para el PP no es que Vox se haya quedado atrás, sino que su mera presencia es la excusa para que el resto de los partidos manifiesten su rechazo a cualquier acuerdo
La respuesta de tres de estos partidos cuando Feijóo o alguien de su entorno ha sugerido abrir conversaciones con ellos ha sido, no obstante, un rechazo completo y automático, cuando no una carcajada. Al PP no quieren verle ni en pintura. Y el principal motivo no es el propio PP, sino sus compañeros de viaje.
El resultado del PP el 23-J fue espectacular. Tras el desastre del 2019, el partido ha subido doce puntos y cuarenta y siete diputados, cifras fantásticas se miren por donde se miren. Vox, mientras tanto, ha sacado un resultado muy flojo, perdiendo casi tres puntos y diecinueve escaños. El problema para el PP, no obstante, no es que Vox se haya quedado atrás (bien que les han hurtado un montón de votos), sino que su mera presencia hace nadie quiera acercarse a ellos. Vox es incompatible con cualquier otro partido que no sea el PP. Y en España, ahora mismo, uno necesita esos partidos para poder gobernar.
Por mucho que los señores de Vox y columnistas extremocentristas madrileños insistan en lo contrario, en nuestro país hay dos regiones que tienen identidades nacionales y culturales propias, con electorados que son increíblemente quisquillosos cuando alguien insiste en negarlas o minimizarlas. También, por mucho que esos mismos señores y columnistas quieran ignorarlo, en España hay muchos votantes que la existencia de esas minorías no les parece una crisis existencial, y que no van a cambiar el voto por mucho que les repitan eso de "los amigos de la ETA". Las últimas (tres) elecciones han demostrado con meridiana claridad que uno no puede formar mayorías de gobierno cargando una y otra vez contra estas dos realidades. El techo del voto anti- nacionalista periférico es demasiado bajo para poder llegar a la Moncloa.
Hasta que el PP no elimine a Vox de la ecuación parlamentaria, el PSOE siempre será la primera opción para pactar de los nacionalistas
El techo del voto anti-nacionalista periférico es demasiado bajo para poder llegar a la Moncloa.
Para la derecha española, es el momento de tomar una decisión. Las estridencias anti- periféricas de Vox hoy (y de Ciudadanos hace cuatro años – algo que pagaron con su propia extinción) son un callejón sin salida. Si quieren volver a la Moncloa, es hora de cambiar de estrategia, y tiene que hacerlo cuanto antes mejor.
Hasta que el PP no elimine a Vox de la ecuación parlamentaria, el PSOE siempre será la primera opción para pactar de los nacionalistas. El PP, sin embargo, no puede anular a Vox a base de parecerse tanto a ellos que acaben por generar el mismo rechazo que ellos, así que necesitan encontrar un mensaje con urgencia que les permita este equilibrio.
El primer paso, si fuera dirigente del PP, es organizar lo antes posible cinco o seis grupos focales (focus groups) con votantes de Vox. El objetivo debería ser buscar un mensaje que por un lado sea atractivo para ellos y que les recupere para el partido, pero que sea lo suficiente ambiguo o inofensivo como para no generar rechazo en Cataluña y Euskadi. Acto seguido, deberían probar varios de esos mensajes en grupos focales con votantes de esas dos regiones, y hacer un sondeo a nivel nacional para calibrar sus conclusiones.
Creo que el PP, por ejemplo, haría bien en abrazar la descentralización, aprovechando que controlarán tantos gobiernos autonómicos, y dejar que los votantes de cada comunidad decidan en temas importantes
La pregunta, obviamente, es cuál es ese mensaje mágico, o si ni siquiera existe realmente. Obviamente tengo mis teorías sobre qué puede funcionar, qué estrategias son viables (y creíbles) viniendo del PP, y cómo articularlas para recuperar el terreno perdido. Creo que el PP, por ejemplo, haría bien en abrazar la descentralización, aprovechando que controlarán tantos gobiernos autonómicos, y hablar sobre dejar que los votantes de cada comunidad decidan en temas importantes, no Pedro Sánchez. Pueden hablar sobre libertad de forma sincera, y atacar a Vox por sus tendencias medievales (España es un sitio bastante libertario). Pueden hablar mucho más sobre apoyar a los trabajadores e igualdad de oportunidades, y hablar sobre cómo mejorar la educación en Cataluña y Euskadi para que el idioma no sea una barrera.
El trabajo de los profesionales de comunicación del PP debería ser el de encontrar qué ideas de las mencioandas podrían dan en la diana. El muy buen resultado del PP el 23-J es una señal clara que la moderación les sirve para ganar apoyos y que iban por el camino correcto, pero no basta. Es hora de ir más allá y encontrar una forma de librarse de Vox y volver a ser un socio viable para los nacionalistas.
Thermidor
Si la ETA , los separatistas, y los comunistas nos odian, es que lo estamos haciendo bien. Para ganar no hay que "centrarse", sino cambiar el discurso dominante. Se trata de la lucha cultural, no de confundirse con el paisaje.
Setre
Este artículo liga muy bien con otro del autor que nos alertaba sobre los políticos y el resentimiento. Es asquerosamente sectario, dando consejos a quien no quiere, consejos que consisten en que cambie para que haga lo que a él le gustaría y azuzando el odio contra un partido más democrático y con más sentido común que la mayoría. Como catalán, ya le contesto: déjense de complejos, unanse a Vox, Valents, C's, planten cara al nacionalismo y den presencia de una vez a España en mi tierra. No nos abandone , ni dejen que los nazis sigan campando a sus anchas por Cataluña. No se dejen llevar por los cantos de sirena de estos totalitarios que te dicen: "o haces lo que yo quiero o no podrás hacer nada".
Gelete
Lo he leído hoy y nunca más. Ya se ve de donde cojea. Siga a lo suyo. que tenga buen día.
Hulshof
Por otro lado reconocerle la estrategia absolutamente equivocada de PP y antes de Cs en Catalunya. Si se hubiera respetado las singularidades propias de Cataluña, no hubiéramos llegado a esto. Pero otra cosa tengo clara, los partidos nacionalistas dicen que quieren dialogo, jamás me lo ha parecido, bajo es supuesto envoltorio van con su razón a imponer su relato. Y eso tampoco puede ser. Necesitamos que cada parte reconozca sus errores y construir a partir de ahí, errores que por la parte del Govern también ha habido. Los catalanes constitucionalistas son hoy en día rehenes en Catalunya. Y el cumplimiento del 25% de horas en castellano en la escuela...pa cuando?
Hulshof
Estoy sorprendido con lo que he leido en este artículo,. Está apoyando Roger a un gobierno que cerró el congreso durante el plan de alarma, que ha gobernado con tics autoritarios. Que si, ya no se arrancan adoquines en Barcelona y se han pacificado las calles si, a costa de cambiar leyes, mintiendo como cuando decían que el delito d sedición se ponía a la altura del europeo. La situación de los catalanes constitucionalistas no ha mejorado, están abandonados, y no se cumple copn la sentencia el TSJC del 25% de horas en castellano. Estos partidos con con los que se quiere gobernar. Usted que Catalunya conoce? No Roger, la ciudadanía ha reforzado a los partidos constitucionalistas en estas elecciones para que gobierne uno, me da igual quien y el otro apoye grandes reformas, que pueden ser das mas autonomía a las CCAA.. Pero este resultado de las elecciones en manos de un oportunista que está tergiversando el resultado y conseguirá en que finalmente haya dos Españas enfrentadas, o mas si usted quiere. En el PSOE están divididos entre sanchistas y socialistas, el PSOE puede acabar como en Francia. Y no se equivoque, me siento identificado con la tercera España de Julio Camba.
José
Este artículo viene a decir que si el PP quiere gobernar España tiene que someterse también, a los continuos chantajes y caprichos, de los nacionalismos egoístas catalán y vasco. Y que VOX desaparezca, como ciudadanos y UPyD. Quizás sea cierto, pero es MUY triste para todos los que no somos nacionalistas. La gran mayoría, por otra parte.
Wesly
A ver, Sr. Senserrich, las "consignas" que dice Ud. que usó la derecha no son manipulaciones, no son falacias, no están basadas en mentiras: Que te vote Xapote se refiere a que te voten los herederos de los terroristas a los que favoreces y ante los que te humillas para conseguir sus votos. Es la realidad, no es ninguna estridencia. El fugado de Waterloo es el fugado de Waterloo, no sé dónde ve Ud. la consigna o la estridencia. Y, al parecer, de este delincuente fugado pretende conseguir Pedro Sánchez los votos para seguir en La Moncloa. Es la realidad. Los independentistas son los independentistas, ellos mismos se encargan de recordárnoslo constantemente. Es la realidad, no es una consigna ni una estridencia. Y Pedro Sánchez pretende, una vez más, obtener su apoyo aceptando (en nombre de todos los españoles) su chantaje. Los comunistas son los comunistas, ellos mismos reconocen su ideologia. No es ninguna consigna ni ninguna estridencia. No son consignas ni estridencias, son verdades como puños. Las consignas basadas en mentiras son las que se han lanzado contra VOX. Que si es un partido anticonstitucional (mentira, quiere cambiar la Constitución legalmente, para eliminar privilegios y gasto político inútil). Que si apoya la violencia contra las mujeres (mentira, VOX está contra todo tipo de violencia y en contra de aceptar que hay una violencia "mala" y una violencia "buena"). En todo caso, la verdad es la verdad, y su recomendación de "moderación" más bien parece pretender la aceptación acrítica de los dogmas de fe irracionales y sectarios que la izquierda radical pretende imponernos a todos. Ud. pretende que nos rindamos preventivamente. Por otro lado, esto de las "estridencias antiperiféricas" suena bien como etiqueta manipuladora pero es una completa falsedad. La verdad es que lo que se crítica, lo que se combate es la arbitrariedad (prohibida por el artículo 9 de la Constitución), se combate la concesión de privilegios a minorias a cambio de votos. Y eso de las tendencias medievales de VOX ya es de traca. Quién tiene tendencias medievales es la izquierda radical (en la que incluyo al PSOE de Pedro Sánchez) que pretende favorecer los reinos de taifas y los privilegios señoriales de determinados colectivos. Su recomendación de "abrazar de descentralización" estaría bien si no nos costara un pastón y si no fuera una fuente de desigualdades y de privilegios. Sr. Senserrich, se le nota demasido su militancia incondicional y acrítica. Su sectarismo, vamos.
jgarejula2
La campaña mediática a la que se refiere el articulista al comienzo sólo responde a la puesta en marcha de una campaña de contención de daños por parte del todavía líder del PP, ANF. Se trata de salvarle a él al frente del partido ante el fracaso cosechado en las urnas. Dicho lo cual, me parece oportuno señalar que los cuatro partidos que menciona como necesarios para que el PP llegue a Moncloa elegirán SIEMPRE la opción que más débil sea y por lo tanto quede más en sus manos. Esto es consecuencia de la malhadada ley d'Hont que les confiere una hiper representatividad, sistema que se introdujo como forma de mantener contento al separatismo olvidando aquello de que no se puede hacer nada por contentar a quien nunca estará contento. Apoyarse en partidos como el PNV es construir en el aire como bien quedó demostrado en la moción de censura que llevó a Sánchez a Moncloa. Lo que habría que hacer, y que nadie hará, es eliminar ese exceso de representatividad como primer paso, que no único.
Norne Gaest
No se desde donde escribe este columnista, pero no tiene mucha idea de política española, más allá de compartir la demonización de Vox, algo común al nutrido rebaño progre y a algún vengativo individuo (el Federico JL, por ej.). Un dato: yo y muchos votantes actuales de Vox no venimos del PP, sino de la abstención. Jamás lo votaremos, por fuertes razones que no es el momento de detallar. Así que no nos trate como menores de edad políticos con esos "grupos focales" que mueven a risa.. Si Vox no existiese habría que crear algo parecido (un partido patriótico, contrario al tinglado partitocrático y sin separación de poderes, liberal económicamente, antinazionalista, etc.). En este caso ha sido víctima de la demonización general de los otros partidos y de tanto papanatas como abunda en los medios, pero no siempre será así.
k. k.
No he leído nunca un análisis más parcial y desacertado. En lo único que tiene razón es en que la derecha ha perdido las elecciones. Afortunadamente en verano la gente no lee el periódico, y además están hasta las narices de las soluciones extemporáneas del periodista de turno. Veamos: ¿Acaso no ganó Ciudadanos las elecciones en Cataluña? ¿Y no es un partido constitucionalista? Entonces qué me cuenta usted. Usted quiere más de lo mismo para acabar donde estamos, en la disolución de España y en el ordeño de la vaca: Extremadura cada vez más pobre, Cataluña y País Vasco cada vez más ricos, y si nos enfadamos sacan a ETA o dan un golpe de estado. Su artículo es vergonzoso. Sánchez con Bildu o Feijóo con Ortúzar, tanto monta, monta tanto. El problema es que el PP genera tirria en Cataluña, desde siempre. Absorber a Ciudadanos ha sido una pésima idea. Que Arrimadas no se presentara a Presidenta de la Generalidad fue una pésima idea. Que Ciudadanos se arrimara en cambio al PSOE en Murcia fue una pésima idea. Es más, que Ciudadanos quisiera salir de Cataluña fue una pésima idea. La solución es crear coaliciones en Navarra, País Vasco y Cataluña, como Navarra Suma, por ejemplo, e ir juntos. Y hacer una estrategia electoral correcta, no un sainete en donde se compara a VOX con Bildu. Los artículos que continúan con la demonización de VOX son perjudiciales y falsarios para la democracia, como lo han sido para estas elecciones. Habla usted de tendencias medievales. Medieval es pegarle a uno un tiro en la nuca. Medieval es proteger a "nuestros jóvenes", como argumentaban los gerifaltes del PNV hablando de los etarras. Medieval es meter en un zulo a Ortega Lara, uno de los fundadores de VOX. Ustedes no tienen ni un sólo argumento para justificar que VOX no sea un partido democrático. Su artículo defiende una estrategia electoralista fraudulenta frente a unos principios morales y cívicos elementales. Me da usted vergüenza ajena.
PijoListo
Ego te absolvo a pecatis tuis
Santivago
En análisis es muy acertado. Vox estaba dentro del PP hace unos años. Dicen que es una escisión por el tema de la corrupción del PP pero no nos engañemos, Vox fue una escisión del PP simplemente por el tema catalán. El PP y medios afines han dejado que Vox crezca pensando en que serian un aliado fiel pero no se esperaban ni que fuesen tan "medievales" ni que generaran tanto rechazo en la población de bien de este país. El PP debe recuperar parte de los escaños de Vox (va en camino) y debe moderarse para poder volver a conseguir mayorías con la ayuda de partidos conservadores de verdad, de los de toda la vida como PNV y la parte no hiperventilada de Junts.
PACO TITOS
Me quedo de piedra leyendo su artículo. Osea que el PP debe de abrazar la descentralizacion!!!! ¿No lo hace ya? Incluso llegó a gobernar con el apoyo de CIU y PNV!!!!! Dice usted "como mejorar la educación en Cataluña y Euskadi para que el idioma no sea una barrera!!!!!! Pero Oiga!! Que la barrera la ponen los gobiernos nacionalistas (independentistas) de esas dos regiones, impidiendo de facto el castellano en los colegios, en las señalizaciones de tráfico, etc. Mire hay un chiste muy antiguo que dice así. En un semaforo en EEUU. Está parado un coche que conduce un negro, en eso llega otro coche a toda velocidad conducido por blanco y le choca por detrás. A continuación llega la policía, y le pregunta al conductor blanco, ¿oye a qué velocidad venía marcha atrás el negro comemier.. da? Bueno pues eso es lonque pasa en España, los únicos que segregan, que prohíben de sus derechos a los españoles de esas dos comunidades son los nacionalistas independentistas, pero ustedes los "progress" haven como el policía del chiste, le dan la vuelta y acusan al inocente. Saludos
Charlyyy
Pretender analizar la situación desde Connecticut da como resultado esta sarta de absurdeces. Donde va a sacar el PP los 40-50 escaños de VOX?? de los nacionalistas?? Solo pretende q el PP complazca a los q nunca van a votarle; vamos lo q viene haciendo estos años....Deberían buscar colaboradores más inteligentes, o menos manipuladores, no sé cual es el caso pero ambos indeseables....
vallecas
Da miedo leerle D. Roger. causa pavor lo que dice En España se teme a una Extrema Derecha que "no existe" y se tolera a una Extrema Izquierda que "si existe" Todos estos ( y usted también) no luchan contra el fascismo, luchan contra la DEMOCRACIA ESPAÑOLA. O es usted de una maldad infinita o un alma cándida. No se cual de las dos cosas es peor.
Architrion
Artículo trufado de datos erróneos. Ciudadanos alcanzó la mayoría de votos en su historia haciendo frente al nacionalismo, hasta el punto de ganar las elecciones en Cataluña y ser el partido más votado en esa CCAA de largo. Su caída tuvo más que ver con no entrar en un pacto de gobierno con Pedro Sánchez que con cualquier otra aventura. Lo mismo con los votos del PP. De las pasadas elecciones donde no se dijo ni una palabra de los nacionalistas a estas últimas elecciones han subido más de 30 escaños. Ni qué decir de la época Aznar. Si se parte de hipótesis falsas se llega a conclusiones erróneas.
jose Ramon
Estoy en profundo desacuerdo con usted; las elecciones no las ha ganado la derecha debido a la constante demonización de Vox por parte de todos los actores y por las meteduras de pata de Feijóo.
JaimeRuiz
Pues parece que fue por la moderación con el secesionismo por lo que el PP llegó a perder en abril de 2019 casi dos tercios de los escaños que obtuvo en 2011. Lo que impidió un triunfo del PP y Vox fue la campaña del PP contra Vox, que era en definitiva una llamada a votar por Sánchez. Allí donde el PP es claro y coherente, como en Madrid, obtiene mayorías claras (es verdad que fue en Madrid donde más perdió, pero fue porque no era Ayuso la candidata sino los voxfóbicos). De hecho, incluso en Cataluña Ciudadanos fue el primer partido por su firmeza ante el secesionismo. Si decayó no fue por eso sino por renunciar a hacerlo. En fin, el columnista no ve ningún problema en el secesionismo sino en la posibilidad de incomodarlo, no hay que añadir nada.