Hoy vinieron dos muchachos a instalar un lavavajillas, uno ecuatoriano y otro peruano. Gente joven y amable. Les pregunté por los años que llevaban en España. El más joven, el peruano, dos años y el otro, el ecuatoriano, veinte. También quise saber si habían recibido ayudas de algún tipo de parte del gobierno nacional o regional. Nada. No digamos ayuda económica, ni siquiera una bolsa de comida que al joven peruano le hubiera venido bien porque vino con su hermana pequeña. Nada.
No tienen que darnos nada, dice el ecuatoriano. Nosotros venimos a trabajar. No a robar ni a hacer cosas malas. A trabajar. Un ecuatoriano y un peruano. Dos panchitos, como les llaman aquí despectivamente, sin que la izquierda culogorda y los neocomunistas armen el aspaviento que arman cuando a un árabe le llaman moro o a un africano negro, negro.
Cuando terminan el trabajo, los felicito y les deseo lo mejor.
¿Hay que ser magrebí o africano para recibir ayudas? Me pregunto, cuando se marchan.
Lo que me lleva a la emigración. Lo primero. No soy emigrante. Soy un exiliado político. Primero en USA y luego en España. El estado español, y en consecuencia los contribuyentes españoles, nunca me han dado nada. Ni tenían por qué hacerlo. Lo único que agradezco a España, y es agradecer todo, es que exista. Desde que vivo en España, en gran medida gracias a mis amigos españoles, y especialmente catalanes, he aprendido mucho y he cambiado mucho, para mejor, de eso estoy seguro. Lo agradezco enormemente. España es un país formidable, luminoso, vívido, tal vez el mejor del mundo para vivir. Vivir en España es vivir una vida aumentada, es vivir doblemente. Mil gracias por eso.
No se pide nada, no se exige nada. Se trabaja, agradecido y respetuoso de las leyes y costumbres del país que te acoge y, por fortuna, no es igual a la porquería de país que tuviste que abandonar
Soy y siempre seré, donde quiera que esté, un exiliado político. Se parece a ser un emigrante, pero no es lo mismo. Cierto que comparto muchas cosas con ellos: el tener que abandonar el país de nacimiento, lo de echarse al mar en una embarcación sobrecargada, junto a decenas de fugitivos; el abrirse paso en un lugar extraño. Comparto el adaptarse a otras culturas. Culturas superiores, por suerte. Si alguien quiere vivir creyendo la monserga de que todas las culturas valen lo mismo, allá él. Culturas democráticas, capitalistas, libres. Es decir, civilizadas.
Otra cosa que comparto con los emigrantes es la obligación de comportarme honradamente. Respetar las normas que otros se han dado. Es, al menos para mí, una obscenidad, irse a otro país a causar problemas o delinquir. Lo que hay que hacer cuando huyes de tu país a causa de una dictadura, o buscando una vida mejor lejos de gobiernos corruptos y ladrones, como suele suceder en África o Hispanoamérica, es ponerse a trabajar. Como estos dos muchachos que vinieron hoy a casa. No se pide nada, no se exige nada. Se trabaja, agradecido y respetuoso de las leyes y costumbres del país que te acoge y, por fortuna, no es igual a la porquería de país que tuviste que abandonar. Lo digo por mí, pero supongo que muchos exiliados y emigrantes compartirán mi percepción. Si no fuesen una porquería nuestros países, no nos habríamos visto obligados a largarnos.
Una vez en un país libre, repito, se trabaja. No se roba. La gente no roba por necesidad, se levanta a trabajar por necesidad. Trabaja en lo que tenga que trabajar, pero no roba. Y, por favor, que nadie salga con el cuento de que en España no hay trabajo. A veces escucho a progres, neocomunistas, chupópteros y gente así, aquello de “están obligados a robar”, por las penurias que sufren. Pero. Nadie está obligado a robar ni para comer, ni para nada. Montarnos en un bote fue una decisión personal, el país que te acepta no tiene ninguna deuda contigo. Si te ofrece algo, por pura generosidad, agradécelo. La mejor manera de hacerlo es trabajando y respetando las normas del país que te ayuda.
A los periodistas izquierdistas les encanta hacer lirismos y romances trémulos con la desgracia de los emigrantes. Siempre cobrando, claro
Y otra cosa. Si te embarcaste en busca de una vida mejor, la responsabilidad de lo que te suceda es exclusivamente tuya. Si en la travesía, por desgracia, se te ahoga un hijo u otro familiar querido, la culpa es tuya. Es, por cierto, lo que les viene sucediendo a los cubanos que huyen de los Castro desde hace más de medio siglo sin que a nadie le importe un carajo. Es fácil, y muy cobarde, culpar a otros de tus decisiones, pero el responsable eres tú. A los periodistas izquierdistas les encanta hacer lirismos y romances trémulos con la desgracia de los emigrantes. Siempre cobrando, claro. Pero la vida nada tiene que ver con los lloriqueos culogordos de los literatos progres. No hay que hacerles caso. En España apenas hay ya realidad. Casi todo es fantasía tribal o ideológica, melodrama, genuflexión y pensamiento grupal, seguidismo, manipulación, analfabetismo y vileza política, flacidez moral, mentira, negocio o postración sumisa ante las tribus antiespañolas catalana o vasca o el sátrapa marroquí que, no me puedo resistir, cada día se parece más a uno de esos batracios gigantes de las películas de Miyazaki. Y el resto, cháchara.
Cháchara y, por fortuna, una ignorada legión de emigrantes honrados que, como los dos que estuvieron hoy en casa instalando el lavavajillas, han venido a España a trabajar.
1961chesterton
!! todo el que venga ha trabajar y pagar impuestos !! , como lo he hecho yo , mi padre , mi abuelo , mi bisabuelo , mi........ , y en orden sin avalanchas mafiosas ? , pues bienvenidos !! ( vox )
Azahar
Agradecida señor Abreu por sus palabras sobre España, de bien nacido es ser agradecido, usted lo ha escrito muchas veces y más hoy en este articulo. La emigración hispano americana, por lo general, es muchísimo mejor que la africana. Nuestros vínculos de idioma y culturales. nos hacen que podamos compartir muchas cosas. Don Juan, aprovechando este articulo, me gustaría que nos dijera porque elogio Cataluña para asentarse en nuestro país y si después de tantos años en España es usted ciudadano de pleno derecho español. Gracias
Tintin
Culogordo, me gusta. Aúna la sencillez con la acidez y precisión descriptiva, sin incurrir en la ofensa. Convengamos que la expresión popularizada por Amadeo Llados, faquin panza, tiene mayor fuerza sonora, bro. Y ya si a continuacion te llama mileurista, pues te hunde, claro. Permítame hacer una recomendación: Decidido, de Robert Sapolsky. Editado, ya se lo advierto, por Capitan Swing.
Luzmasluz
Bien dicho... insuperable la descripción de la "realidad actual española". tal cual...
marqueslinchado
Buen artículo, claro, como siempre.
Talleyrand
Comparto totalmente el sentimiento y la apreciación. Además tenemos una deuda con las americas. Aquello fue España y de alguna manera lo sigue siendo. Empezando por ti querido escritor y continuando con el medico cubano que me reviso para el carné de conducir. Los dos sois españoles. Absolutamente españoles. Tuve el honor de decirselo acabada la consulta. Al final todos somos de donde colgamos el sombrero pero si vienes de cubao puerto rico estas mas cerca que si vienes de mejico. Curioso. Y por supuesto el altiplano boliviano o la Patagonia esta mucho más cerca que Tanger. Formas de ver el mundo, el idioma y sus dejes y un pasado comun muy largo nos unen. Incluso y parecers una aberracion pero la cercania mediterranea con paises del este como Grecia me ha llegado a sorprender. Mucho mas cerca de nosotros que los vecinos del sur que estan al lado. Debe ser el poso cultural y cristiano que llevamos dentro. La forma de vivir en familia, el trato a las.mujeres, la cultura del vino, y el concepto del destino. Eso nos ha hecho lo que somos durante siglos y algunos lo llaman nuestra cultura,. Por eso , los afines a nosotros bienvenidos si vienen a trabajar. En dos dias son como nosotros. Integrados totalmente.
Norne Gaest
La inmigración hispana es hermana o prima hermana por lo que le debe resultar fácil adaptarse. En Hispanoamérica existe la lacra del indigenismo, pero eso es fácilmente superable con un mínimo conocimiento histórico. España llevó la civilización donde solo había barbarie y opresión. El Imperio español funcionó bastante bien (como reconoció Humbolt y otros visitantes) y las cosas se jodieron con las independencias. La inmigración islámica es otra cosa. En esos países y culturas no tienen o tenían otra cosa que Islam. Algunos intentaron coger dos elementos occidentales: marxismo y liberalismo, pero ninguno cuajó. El marxismo fue aplastado y el liberalismo fue corrupción. Al final no les quedó más que islam y/o dictaduras. La islámica, pues, no es una inmigración deseable, sobre todo para España, que necesitó varios siglos para desembarazarse del Islam, y por eso pudo integrarse en los países occidentales y hoy no es como el Magreb. Si España demográficamente se salva de la creciente islamización de Europa será por la presencia de la inmigración hispana y por controlar la que viene de África y Asia. Sobre lo primero soy optimista. Sobre lo segundo pesimista. Ahora bien, dentro del Islam y su nefasta influencia intrínseca, se pueden hacer algunas diferencias: no es lo mismo la inmigración iraní, un país bajo dictadura de los curatos chiíes, o de mujeres no prisioneras de lazos familiares) y otra la proveniente varones con valores islámicos y familias enteras. Conozco iraníes des islamizados (por ejemplo, una de mis amigas) y mujeres musulmanas (por ejemplo, una que cuida a mi madre) que han huido de los hombres de sus países de origen. Si admitimos una inmigración islámica no selectiva, para empezar, ni ellas ni nuestras mujeres autóctonas estarán seguras, además de otros males inherentes al Islam. En cuanto a que en España se vive muy bien, es evidente. Es casi un milagro, dado parte del paisanaje que se cría en estos lares (progresistas, nazionalistas regionales y otras hierbas), pero todo tiene un límite. En algunas o muchas zonas la seguridad se está deteriorando, los servicios públicos también (el descenso de calidad en la atención sanitaria puede ser alarmante) y no sabemos donde va a acabar la deriva dictatorial capitaneada por los progresistas y la fragmentación progresiva liderada por los nazionalistas regionales. Tuvimos una guerra civil y una dictadura por esta causa, pero los herederos de los que las provocaron (izquierdas y separatistas) no han aprendido nada.
vallecas
Los defensores de lo absurdo han desvirtuado, (quitado la virtud), conceptos tan humanos como acogida, solidaridad y empatía cuando aceptan la criminalidad, las mafias, las mentiras y el chantaje emocional como punto de partida. La UE tiene recursos (dinero a "espuertas") para hacer Programas de Acogida de jóvenes (y jóvenas) africanos que quisieran vivir en Europa. Todo limpio y todo legal. Se podría decir que es "algo de izquierdas", pero la izquierda "culogordo" como usted dice, Sánchez el criminal y la Barbie Úrsula Von der Pony no tienen tiempo para esto.
DeGrissi
Igual que su jefe el Dr. Psicópata, diciéndole a Pablo Casado "bueeeno cómo se nota que estamos en campaña eh?"; el elemento.... que está "en campaña" todos los días, desde que se sentó en la poltrona.
ArchieEnVozpopuli
De biennacidos es ser agradecido. Usted, amigo Abreu, acaba de demostrar que lo es; yo quiero serlo también con usted por sus sentidas palabras para España. La asquerosa pringue izquierdosa que detenta el poder y que nos está hundiendo en una deuda pública insoportable utiliza a los inmigrantes obscenamente. Por eso es tan importante y tan de agradecer un testimonio como el suyo. Gracias, Sr Abreu, merece usted todo nuestro reconocimiento. Le deseo lo mejor.
NormaDin
Coincido en todo con el Sr. Abreu. Ademas de coincidir, en ese artículo me ha mostrado una convicción que en mí lleva mucho tiempo flaqueabdo: que éste sea un país tan formidable. Tendré que hacerle caso a una persona tan perspicaz.