Parte de la derecha política y de la izquierda (ayer mismo en el El País, Francesc de Carreras) creen que el nacionalismo español es tan condenable como el separatismo supremacista vasco o catalán.
Les gusta repetir esta simpleza: "No se puede combatir un nacionalismo con otro nacionalismo".
Craso error. La historia demuestra lo contrario.
De ahí libros tan equivocados, a mi juicio, como 'Mater dolorosa', de Álvarez Junco: todos los nacionalismos son igualmente liberticidas. Pues no. Hay nacionalismo totalitario y nacionalismo liberal.
Han acertado 12 intelectuales de izquierdas en un comunicado en favor de la gobernabilidad y el fin del bloqueo político. Al referirse al nacionalismo lo apellidan como "identitario", lo que es una clara referencia al vasco y al catalán.
El nacionalismo español es el mismo que defienden franceses, ingleses, suecos, suizos o norteamericanos, y que venció en 1945 al nacionalismo totalitario
El nacionalismo identitario vasco (en el caso del PNV racista) y catalán es totalitario, excluyente, expansionista, supremacista y violento; lo conocemos en Europa y lo padecimos entre 1939 y 1945: Alemania e Italia.
EE.UU., con su nacionalismo liberal, derrotó al nacionalismo militarista de Japón en 1945.
El nacionalismo español que contiene la Constitución de 1978 es justo lo contrario del totalitario. Por eso los nacionalistas vascos y catalanes no soportan la Constitución. Es el mismo nacionalismo que pueden defender franceses, ingleses, suecos, suizos o norteamericanos: aquel que venció en 1945 al nacionalismo totalitario.
Señor Carreras: creo conveniente que ustedes reflexionen y distingan un nacionalismo español liberal, constitucional, inclusivo, defensor de las libertades y por el que han sido asesinadas casi mil personas a manos de nacionalistas identitarios.