Pedro es independiente, al igual que los gatos, siempre, usa algunas conductas tan repentinas como peligrosas que pueden afectar hasta su propia vida, como los felinos callejeros cuando pelean con otros en las alturas de los tejados, arriesgándose a un destino fatal.
Hoy por hoy, en cada uno de sus días como presidente, a Pedro le sucede algo que nos deja estupefactos. Algo que él y sus gurús lanzan desde adentro para confundirnos, o bien algo que les entra desde afuera como esos drones de guerra que aparecen por las ventanas sin permiso. Habría que ver cuántas ventanas de la Moncloa se cuentan ya con los vidrios rotos. Ellos van como si nada, pero que las hay, las hay.
Mientras tanto, Pedro interviene en nuestras vidas de forma hiperactiva cotidianamente. Cada vez más a fondo. Él y su filarmónica, ya muy desafinada, siguen interpretando un discurso sectario especialmente dirigido a los nódulos sociales adonde se apoyan valores que a ellos no les sirven.
Por ejemplo, tienen que terminar con la España de la familia tradicional y para eso primero tienen que dividirla. En eso están; muchos lectores con su prole completa y bien desarrollada podrían dar fe. Porque adoctrinan, confunden a nuestros hijos con contenidos asquerosos, y crean diferencias entre parientes pobres y ricos, o entre los que son empleados públicos versus los emprendedores, los que estudian versus los que no (porque para qué) y un largo etc...
No es para despreciar que haya sobrevivido seis largos años y, por ahora, siga inamovible luchando en una biósfera política llena de trampas y traiciones
Ya no es solo el fútbol, esa era una división sana. Hoy aparecen fisuras que antes no existían, las grietas que están asomando en las familias ya superan ampliamente la barrera de los cuñados. Otros gobiernos bolivarianos, han logrado que la grieta se abra entre padres e hijos, o entre primos y hermanos, aquí espero que nunca suceda.
Sin embargo, no subestimemos al 1, ya ha hecho mucho de lo que parecía imposible. No es para despreciar que haya sobrevivido seis largos años y, por ahora, siga inamovible luchando en una biósfera política llena de trampas y traiciones, que el mismo tejió como la tela de una araña roja sobre todo el estado español.
En este momento no me alcanzan los dedos de la mano para contar los quilombos que tiene este muchacho. Cierto es que está muy bien rodeado en términos de estrategia y tiene un equipo probado en generar confusión social. Pero tampoco hay mano humana que pueda tapar la luz del sol cuando sale y se eleva radiante.
No puede acumular más frentes a defender, y si bien algunas crisis cercanas, como la de Sumar, le parecen a su entorno unos distractores oportunos, apenas les alcanza para tomar un poco de oxígeno y otra vez a meter la cabeza en el cubo de agua. Un cubo lleno de agua mezclada con detritus de su propia cepa, como la del calenturiento Errejón. Ningún hombre es un estadista confiable si su picha loca condiciona su actividad política, y no lo dice Mónica Lewinsky, lo digo yo.
La acumulación de frentes hostiles resulta para Pedro en la reaparición de aquel ser mitológico llamado Kraken, un gigantesco pulpo marino que abrazaba grandes barcos y los destruía, hundiéndolos sin remedio.
El Adonis contemporáneo
Sánchez tiene los días contados, pero no se puede descansar sobre esta certeza, porque justamente allí está el problema mayor.
Sucede que la política no es meramente matemática y Pedro, que bien lo sabe y además les lleva mucha ventaja técnica, les juega el clásico en otra liga. Además, para su suerte, cuando se compara con el jefe del PP, al mirarse en el espejo se percibe como un adonis contemporáneo, y la verdad es que algo de razón tiene en ese caso.
En fin, que la oposición tampoco termina de poner en foco la realidad por causas diversas, entre ellas la falta de gafas o tal vez por un problema de cataratas en algún par de ojos. Que habrán de ser las del Niágara, porque para no ver lo que más le conviene hacer ahora mismo y en forma urgente, tienen que ser enormes.Todo el partido azul necesita un sacudón, o mejor un terremoto.
La crisis del PP está apenas comenzando, Pedro sabe que, aun estando él con un ala rota, es el momento perfecto para que, desde el Gobierno, aproveche y e introduzca todas las condiciones excepcionales que varíen la estructura del estado español y lo conviertan en otra cosa. Porque, mientras tant,o Europa lo confunde y el PP se deja estar.
La fórmula secreta de estos comunismos pseudo democráticos consiste en emitir dinero o pedir prestado hasta que tus nietos deban bastante
Hoy ni siquiera puede ofrecer una fisonomía homogénea como fuerza política organizada, preparada y capaz de intervenir en el desastre que está dramatizando adrede el 1. El PP se ha comido, de parte de Sánchez, el famoso abrazo del oso.
Lo he dicho y lo repito, la fórmula secreta de estos comunismos pseudo democráticos consiste en emitir dinero o pedir prestado hasta que tus nietos deban bastante. Luego, cuando te diste cuenta y los pudiste apartar, te queda un desastre tal, que ni el nuevo gobierno que has elegido puede con él y se diluye tu esperanza.
Entonces vuelven. Son unos genios del disfraz. Lo comprueban cada día, por ejemplo, parece que uno de sus mayores defensores de los derechos de la mujer se sentía con derecho de tocarle el culo a todas. Así de cínicos e hipócritas son capaces de ser.
Pero claro, si estos miasmas que el 1 usaba como lubricante íntimo para empomarse a la democracia por izquierda se le enferman, tiene que correr a curarlos. No puede dejar que se suicide esa franja roja punzó, que resulta imprescindible para prolongar, aunque sea un poco, su estadía en el poder.
Da la sensación de que el presidente se verá en breve obligado a alzar su escudo y pelear contra muchas espadas que están cubriendo 360 grados alrededor de él, de su familia y de su gobierno.
Sin embargo, su estrategia real es la del Grupo de Puebla, es seguir atropellando el sistema democrático a marchas forzadas.
Ya anda algo desesperado, es cierto, como lo prueba esto de llevar a Begoña a bailar a Bombay justo en el momento en que su socia Delcy, la de las maletas grandes, ¡también está en Bombay! Vamos, que da para varios Gin tonics.
Aun así, mientras las llamas bolivarianas devoran lo que queda de la institucionalidad española, Pedro arremete con el control de los medios oficiales a todo o nada.
RTVE podría pasar a llamarse RT en poco tiempo más y nadie se daría cuenta. Dos letras menos, ahí ahorramos.
Y así en todos los frentes posibles.
De esa manera se aseguran de que la situación posterior sea insostenible para cualquier gobierno que los suceda por muy bueno que sea, porque el plan incluye que la sociedad reciba la factura de esta fiesta venezolana cuando ellos ya no estén en el poder.
Así se aseguran de que la popularidad que consigan quienes los derroten, baje dramáticamente y en poco tiempo, impulsada por las condiciones económicas en que dejan al estado y a un tejido social roto, endeudado, mal educado, inseguro, desfigurado.
Y entonces cambian medio equipo y regresan, sencillo.
Así lo hicieron Lula y Cristina Kirchner, así lo intentan Evo y Correa.
Entonces sí, el sistema clientelar le servirá de nuevo a él mismo o al siguiente sátrapa como juego de mesa para entretener a cada familia española, porque en las mesas no quedará otra cosa.
Cuidado, la batalla será a la postre cultural, y muy ardua.
Hay que tomar en cuenta que la gente extraña las pagas a cambio de nada, porque las ha tenido durante tanto tiempo, que hasta se ha encariñado con ellas.
Entonces, cuando alguien trate realmente de poner la economía en orden, correrá el riesgo de patear el cable trampa que detona las bases de la resurrección de un sistema de vida que hoy ya se encuentra malherido.
Sánchez se tiene que ir. Pero con eso no arreglaremos nada si no aprendemos la lección y miramos muy bien adonde apoyar el pie antes de dar nuestro próximo paso.
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