"Si quisiésemos sillones yo podría ser vicepresidenta, pero nosotros nunca hemos querido sillones: queremos cambiar la vida de la gente", dijo Irene Montero en 2019 en una entrevista en Los Desayunos de TVE. Pero cuatro años después, con Podemos desangrándose y con la necesidad de postrarse ante un nuevo liderazgo, la formación morada ha activado la 'operación salvar a la soldado Montero'. O más bien, salvar su espacio en la composición del Congreso de los Diputados que saldrá tras los resultados de las elecciones del 23-J.
Porque la nueva líder de la izquierda a la izquierda del PSOE no quiere a Irene Montero en las listas de Sumar. Es una de las condiciones que la 'dama roja' ha impuesto a la formación morada para poder unirse a su proyecto. Pero en Podemos se resisten a abandonar a su suerte a la que consideran uno de sus mejores activos. En términos ajedrecísticos, la reina. Por ello, varias de las principales caras de la formación han salido a reivindicar su figura y reunir así toda la presión en torno a la figura de Díaz.
Pablo Iglesias, exlider de Podemos y marido de Montero ha sido el primero en salir a defenderla tras el principio de acuerdo anunciado ayer por Ione Belarra. Lo ha hecho en una columna de opinión en la que ha tachado de "error político" el veto impuesto por Yolanda Díaz. Además, ha trasladado toda la presión del acuerdo a la líder de Sumar, de quien dice que su entorno le advierte que "está comprometiendo sus propios objetivos políticos" al convertirse en "ejecutora final de una violenta campaña orquestada desde los más siniestros aparatos de las derechas mediática, judicial y política". Mismo discurso que esgrime la maquinaria propagandística morada desde el aluvión de críticas recibidas tras la aprobación del 'solo sí es sí'.
Iglesias ha pedido una rectificación a Díaz, mismo mensaje que le ha trasladado las secretaria de Organización de Podemos, Lilith Verstrynge, en la mañana de este sábado a las puertas de las cortes. En hasta tres ocasiones ha repetido que "quedan nueve días para rectificar" y que "ojalá lo reconsideren". Preguntada por una unión sin Montero, Verstrynge ha afirmado que en Podemos "no contemplan esa opción".
Al igual que Iglesias, también ha afirmado que Díaz tendría consecuencias negativas de cara al electorado si decide mantener el veto a Montero. Para ella, es un "mensaje peligroso para la sociedad" por ser un mensaje de disciplinamiento al movimiento feminista, a las mujeres y al conjunto de la sociedad que quiere implicarse en política". Pese a ello no contempla que su partido concurra en solitario a las elecciones: "Cualquier otra cosa sería ponérselo fácil a la derecha y la ultraderecha".
Ione Belarra, por su parte, ha escogido una herramienta más institucional para reafirmar el apoyo a Montero para ir en las listas de Sumar para el 23-J´. Distinto canal, pero mismo mensaje: trasladar a Díaz que su decisión es un "error político". Ella, que tiene garantizado el puesto número 5 en la lista, afirma que el partido de coalición le pide "una vez más" que Podemos "renuncie a su principal activo electoral". Además, Echenique ha mostrado su apoyo a Montero en Twitter, aunque sin mencionar nada sobre el estado de la negociación.
Mientras tanto, Yolanda Díaz guarda silencio. Sabe que tiene la sartén por el mango, una sensación acentuada tras el batacazo de Podemos en las elecciones del 28-M. Por ello, en la mañana de este sábado, ha presentado la candidatura de Sumar, pero no ha dedicado una sola mención a Podemos o a Irene Montero.
Aunque desde la formación morada señalen que mantener el veto le convertiría en el brazo ejecutor de la derecha o en una opresora de feministas, es consciente que el debate en Podemos es muy diferente: intentar salvar el sillón de Montero e inmolar al partido o abandonarla a su suerte. Aunque esto último, salvo cambio de guión, nunca ocurrirá: antes saldrá la todavía ministra de Igualdad a ofrecerse como sacrificio para salvar así a sus compañeros.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación