María Jesús Montero y Pilar Alegría son las principales favoritas a ocupar el puesto de número dos de Pedro Sánchez en las elecciones generales del 23 de julio, según ha sabido Vozpópuli de fuentes socialistas. La ministra de Hacienda o la de Educación escoltarán al presidente del Gobierno en la lista de Madrid tras la renuncia de Nadia Calviño a integrarse como independiente con el PSOE el 23-J.
Sánchez contaba con Calviño para acompañarle. Pero la titular de Economía ha descartado esta semana sumarse a la candidatura del PSOE. Calviño no es afiliada socialista pero ha participado activamente en la pasada campaña para las municipales y autonómicas del 28 de mayo. "Nunca he ido en las listas y creo que mi compromiso con el proyecto no tiene nada que ver con estar en una", dijo Calviño autodescartándose.
El PSOE no tiene demasiado tiempo para elaborar las listas y, según estas fuentes, Montero y Alegría son las mejor colocadas para tapar el agujero que ha dejado Calviño. Los territorios elevarán las propuestas de candidaturas a lo largo de la próxima semana. Y Ferraz ratificará todas ellas en el comité federal que tendrá lugar el 10 de junio.
PSOE en Andalucía y Aragón
Este diario ha consultado con la dirección del PSOE, que ha declinado responder sobre las dos ministras. Montero y Alegría son, junto a Patxi López, las dos caras que Sánchez decidió colocar en primera línea en julio del año pasado para relanzar el partido tras la mayoría absoluta del PP en Andalucía. Montero se hizo cargo de la vicesecretaría general del partido en sustitución de Adriana Lastra. Alegría asumió la portavocía del PSOE. La titular de Educación se ha convertido en el látigo habitual del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, en las ruedas de prensa de los lunes y la mayoría de medios de comunicación.
"Si no va Calviño, es lógico que cualquiera de ellas sea 'número dos'", reconocen fuentes socialistas. "Además tampoco hay demasiado tiempo para buscar un golpe de efecto. Incluso creo que no estamos en disposición de poder darlo".
Sin embargo, esta decisión tendría consecuencias en las comunidades de origen de las ministras: Andalucía y Aragón. Montero es la cabeza de lista natural por la provincia de Sevilla. Ya lo fue en 2019. Alegría, por su parte, debería, por lógica, encabezar la lista por Zaragoza. Alegría no es actualmente diputada en el Congreso. Sánchez la incorporó al Gobierno en 2021. En ese momento era la Delegada del Gobierno en Aragón.
Si no acompañan a Sánchez, ambas deben ser elegidas por sus respectivas agrupaciones y comités provinciales y autonómicos para ir en las listas al Congreso el 23 de julio. Con Montero no existe demasiada duda de que recabaría los apoyos con facilidad. En Aragón, Alegría y el líder socialista en la comunidad, Javier Lambán, no han cultivado la mejor de las relaciones en los últimos tiempos. Lambán ha sido uno de los barones damnificados por el tsunami del 28-M, pero todavía tiene el control del partido en Aragón a pesar de perder el Gobierno.
Dudas sobre el dos y el uno
El entorno de Alegría "descarta" que vaya a ser la número dos de Sánchez. Pero, al mismo tiempo, y desde Aragón, tampoco dan por hecho que la ministra sea automáticamente la candidata. Ferraz puede decidir unilateralmente. La dirección socialista ya vetó a algunos candidatos en las listas que presentaron los territorios en las generales del 2019.
La incógnita sobre quién acompañará a Sánchez en la lista -Carmen Calvo lo hizo en 2019- se une a las dudas manifestadas por su principal rival el 23-J sobre la propia continuidad del presidente del Gobierno. Vozpópuli ha informado de que el PP sospecha de que Sánchez todavía podría hacerse "un Zapatero". Es decir, que renuncie a la liderar la candidatura en el último momento.
En 2011, José Luis Rodríguez Zapatero también sufrió una hecatombe en autonómicas y municipales y renunció la candidatura de generales, que asumió Alfredo Pérez Rubalcaba. La única diferencia es que entonces el adelanto de generales fue a noviembre y el de ahora será en pleno julio.
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