El Gobierno y las comunidades autónomas han cerrado filas frente al ébola y han trasladado a la sociedad un mensaje de tranquilidad, a la vez que han defendido la necesidad de desarrollar una política informativa con el máximo rigor y transparencia. Tras la reunión del Consejo Interterritorial de Salud, la ministra de Sanidad, Ana Mato, y los consejeros de las 17 comunidades autónomas han comparecido juntos ante los medios de comunicación, dando una imagen de unidad.
En la reunión han firmado una declaración institucional en la que manifiestan su apoyo a la auxiliar de enfermería Teresa Romero, infectada por el virus del ébola, y la confianza en la capacitación y dedicación de los profesionales sanitarios para afrontar cualquier problema de salud pública.
Ana Mato insiste en la correcta gesitón: "Se han cumplido todos los protocolos"
Sobre posibles errores cometidos en la gestión de esta situación, la ministra de Sanidad ha insistido en que "se han cumplido todos los protocolos" y que "estamos investigando" las irregularidades que pudieron conducir al primer contagio de ébola producido fuera de África.
Preguntada por si se siente desautorizada tras la creación de un comité específico que estará presidido por la presidenta del Ejecutivo, Mato ha reconocido su "satisfacción" por la decisión acordada en el Consejo de Ministros, ya que a su juicio es un "acierto" que permite "institucionalizar la coordinación que ya existía" entre el Ministerio y la Comunidad de Madrid. "Para afrontar una situación como a la que nos enfrentamos en este momento, vamos a trabajar 20, 24 horas o las que sean necesarias hasta que consigamos afrontar esta crisis a la que nos enfrentamos", ha defendido.
Nuevos protocolos
Sanidad ha acordado con las comunidades autónomas reforzar los protocolos de actuación ante el virus del ébola y, entre otras cuestiones, han decidido bajar, de 38,6 a 37,7 grados, el umbral de fiebre de las personas que hayan estado en contacto con un posible infectado por el virus. Mato ha explicado que este umbral es el que ya se está aplicando en la Comunidad de Madrid, pero a partir de ahora se incorporará al protocolo general para todas las comunidades autónomas. Hasta ahora, el protocolo solo consideraba necesario el ingreso de un paciente si superaba los 38,6 grados de fiebre, pero con esta medida -ha señalado Mato- se reforzará el seguimiento de los niveles de bajo riesgo
