Sociedad

Arturo Fernández, Pizarro y la sobrina de MAFO, boicoteados en la Universidad

Alrededor de un centenar de personas se han acercado hasta el Aula Magna de la Universidad Autónoma de Madrid, buscando a Esperanza Aguirre o a alguna otra autoridad regional. Han irrumpido al grito de "pública" y mostrando unas cartulinas rojas al paso de las autoridades.

El solemne acto de apertura del curso académico universitario 2012-2013 ha tenido que ser hoy suspendido entre los pitidos, gritos y abucheos de un centenar de representantes de los sindicatos de enseñanza y alumnos, que protestaban por los recortes y las subidas de tasas.

Entre los afectados por el boicot estaban Manuel Pizarro, ex presidente de Endesa y actual presidente del Consejo Social de la Universidad Autónoma de Madrid; Arturo Fernández, presidente de la patronal madrileña; y la académica de la Lengua Inés Fernández-Ordóñez, sobrina del exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández-Ordóñez.

El rector de la UAM, José María Sanz, ha lamentado que el acto se estuviera desarrollando de esa forma tan "triste"

Los rectores de las Universidades madrileñas han acudido esta mañana, sin la presencia de ningún miembro del Gobierno regional -excepto el director general de universidades, Jon Juaristi- a la apertura del curso universitario en el Aula Magna de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma.

Con gritos de "Este acto no se celebra", "No a la privatización de la sanidad y la educación", "Pública, pública", "Huelga indefinida", "Qué casualidad, qué casualidad, el hijo del obrero no puede estudiar" o "Fuera los políticos y las empresas de la universidad", durante media hora decenas de manifestantes presentes en la sala han impedido que comenzara el acto.

Tarjetas rojas como protesta

Ataviados con camisetas o chalecos verdes -en defensa de la educación pública-, y exhibiendo tarjetas rojas a modo de protesta para simbolizar la expulsión de los rectores y los políticos, los manifestantes han impedido que se escuchara el inicio del acto mientras los rectores esperaban sentados en sillas en el estrado.

Arturo Fernández ha sido insultado y ha recibido gritos como "el patrón solo entiende un mensaje: huelga y sabotaje". Pilar Cámara, secretaria general de la Universidad Autónoma -que este año acogía la apertura solemne del curso- ha intentado durante varios minutos pronunciar su discurso, entre los pitidos y las consignas de los manifestantes.

Al no poder continuar, el rector de la UAM, José María Sanz, ha lamentado que el acto se estuviera desarrollando de esa forma tan "triste", en el que la palabra ha sido sustituida por gritos, y ha pedido a Jon Juaristi que declarase inaugurado el curso.

Han coreado gritos como "este acto no se celebra" o "no a la privatización de la sanidad y la educación"

Juaristi, en nombre de la presidenta regional, Esperanza Aguirre, ha inaugurado el curso y ha intentado cantar con el resto de asistentes el Gaudeamus igitur, aunque ante la continuación de los gritos y pitidos ha desistido.

Tras la suspensión del acto -que, entre otras, cosas, ha impedido a la académica de la Lengua Inés Fernández-Ordóñez pronunciar la lección inaugural-, algunos de los rectores presentes han lamentado los hechos, y han coincidido en que no ayudan a defender a la universidad pública.

Antes del acto, responsables sindicales han justificado las protestas alegando que la universidad pública está siendo "asfixiada" desde 2007 "poquito a poquito y sin que se note mucho" al ir reduciéndose paulatinamente su presupuesto, según César Gallo, de CCOO.

Ya se habla de "curso caliente"

El rector de la Universidad Complutense de Madrid, José Carrillo, también se ha referido a lo sucedido y ha señalado que lo ocurrido "no contribuye a defender la universidad pública en este momento tan grave". "Ha sido la interrupción de un acto de una universidad pública y nos parece que eso no es democrático ni favorece a la universidad pública", ha dicho.

En este sentido, ha considerado que los manifestantes, "por mucho que gritasen consignas a favor de ella", no han hecho algo "positivo". Preguntado por si se prevé un curso "caliente", Carrillo ha reconocido que puede serlo pero ha añadido que "hay que intentar dialogar". "Hay cosas que no están en nuestras manos, que nos vienen impuestas desde arriba, como son los recortes, pero sí podemos dialogar con el personal en qué manera puede repercutir en la universidad", ha señalado.

Para concluir, ha indicado que la situación vivida este lunes es el "resultado de las políticas que están siguiendo a nivel regional y nacional de dar prioridad a los recortes y no a la inversión, que es lo que necesita la universidad".

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación
Salir de ver en versión AMP