“Es atravesar la puerta de una oficina y un despacho en cualquier empresa y parece que a los gays y lesbianas se nos ha tragado la tierra; parece que no existimos. No oigo a ningún jefe hablar de las últimas vacaciones con su novio ni a una empleada con fotos de su mujer en su mesa”. Son palabras de Marta Fernández, consultora y fundadora de Lesworking, una red profesional internacional para mujeres lesbianas o trabajadoras por cuenta ajena.
Marta explica que unas 700 mujeres de todo el mundo se han unido a esta red que busca prestar apoyo profesional a este colectivo. En algunos casos se trata de buscar negocios y en otros de ayudar a buscar empleo a mujeres que pertenecen al colectivo LGTB. Lesworking ha firmado un acuerdo con el consejero de Asuntos Sociales del Gobierno de Madrid, Jesús Fermosel, para fomentar los programas LGTB en la Comunidad.
El Gobierno regional pretende con este acuerdo impulsar la inserción laboral de mujeres lesbianas a través de un proyecto piloto. Busca también influir positivamente en erradicar de la sociedad cualquier tipo de discriminación por motivos de identidad u orientación sexual.
Se pondrá en contacto a usuarias del programa LGTB que estén buscando trabajo con estas empresarias de la red Lesworking para que afloren oportunidades laborales. El consejero Jesús Fermosel cree que hay que sumar esfuerzos en la eliminación de la discriminación por motivos de diversidad sexual.
La Comunidad de Madrid pretende impulsar la inserción laboral de mujeres lesbianas a través de un proyecto piloto
La presentación de este programa fue todo un ejemplo de normalidad y visibilidad. Cada una de las empresarias o profesionales que pertenece a la red, todas lesbianas, explicaba su cargo o profesión y se definía en favor de la visibilidad sexual en las empresas. “Es un medio más de luchar contra la discriminación”, afirmaba una de ellas.
Marta Fernández señala que más de un 50% de los gays y lesbianas trata de ocultar su orientación sexual en el trabajo. Sin embargo, hay países, como EEUU, en los que hay interés por parte de las propias empresas en que sus empleados salgan del armario. “Está demostrado –explicaba en una reciente charla-que las empresas que promueven la diversidad sexual generan equipos de trabajo más creativos y más productivos lo que mejora la cuenta de resultados”.
La creadora de Lesworking dice que en Estados Unidos un 30% de las compañías se han comprometido con la diversidad, “lo que hace que atraigan el talento gay”, que se calcula que es un 10% de la fuerza laboral. La promotora de la red de lesbianas afirma que hay que lograr que las empresas implanten políticas de igualdad. “No se sostiene –comenta- que de vergüenza hablar de nuestro novio o novia en la oficina. Es un buen negocio salir del armario en la empresa porque se traduce en una mayor productividad”.
Ocultar la sexualidad
Mantiene que según estudios de instituciones prestigiosas las personas que ocultan su sexualidad en las empresas tienen un 20% menos de productividad en su compañía. “Las empresas que se comprometen con el colectivo gay -añade- aumentan sus ventas, somos fieles a las marcas que nos respetan y nos hacen un guiño”.
Recordó el caso de la empresa italiana de pasta Barilla. Su presidente realizó hace algún tiempo unas declaraciones homófobas, lo que provocó un boicot por parte de este colectivo y de sus personas cercanas. Marta Fernández recuerda que mientras en España un 88% de la población acepta la homosexualidad y una pareja del mismo sexo se puede casar, en 80 países es delito. En algunos se castiga con la pena de muerte.
La firma de este acuerdo con el Gobierno regional se enmarca dentro del programa de LGTB de la Comunidad de Madrid. Desde su creación se ha atendido a 10.528 personas de las que 2.262 eran lesbianas.
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