Varias organizaciones se han concentrado este sábado frente a la entrada del Valle de Los caídos para pedir su conversión en un memorial de la lucha antifranquista, al estilo de lo que se ha hecho con los campos de concentración nazis.
La convocatoria la ha realizado el Foro Social de la Sierra junto al Foro por la Memoria de la Comunidad de Madrid, que cuentan con el apoyo de La Comuna, Asamblea Sierra Antifascista y Encuentro. Casi un centenar de personas han secundado la concentración.
Diez años de reivindicaciones
La concentración se ha producido frente al Valle de Cuelgamuros, que recuerdan que "fue rebautizado por la Dictadura como Valle de los Caídos". Se trata del décimo año en el que se realiza la concentración, ya que la primera tuvo lugar el 17 de noviembre de 2007, "seis días después del asesinato de Carlos Palomino por un neonazi".
"Un año más, invitamos a todas las personas que creen en el derecho a la Memoria a concentrarse en la puerta del Valle de Cuelgamuros, exigiendo que éste se convierta en un memorial, al estilo de los que se han hecho en los campos de concentración nazi, en el que se pongan de manifiesto los crímenes de la dictadura y que se rinda homenaje a sus víctimas y a quienes lucharon contra el fascismo, donde no puede haber lugar para la tumba del dictador ni su cruz, que solo sirven para simbolizar las atrocidades que se cometieron en su nombre", indica el manifiesto que han leído.
1936-2016 80 años de impunidad
Bajo el lema de "1936-2016 80 años de impunidad" se ha realizado la convocatoria, en la que el manifiesto recoge que los vecinos de la sierra del Guadarrama siguen en "en pie de lucha" recordando y homenajeando a los vecinos y vecinas de la sierra que "hace 80 años se comprometieron en la lucha antifascista entregando los mejores años de sus vidas".
"Esta lucha les llevó en muchos casos a la tortura, la cárcel y los trabajos forzados, el destierro, el exilio e incluso, la muerte", recoge el documento.
"Para todas y todos los que año tras año nos congregamos en esta fecha frente a Cuelgamuros, estas personas no son víctimas sino son un ejemplo de dignidad. Ahora, en plena ofensiva del neoliberalismo y el neofascismo, la lucha de estos hombres y mujeres deben servirnos de acicate para no renunciar, para no resignarnos, para no mirar a otro lado, o para no buscar en soluciones individualistas el camino a un mundo más justo y solidario", reivindican.