La auxiliar de enfermería afectada por el virus del ébola, Teresa Romero, se encuentra "estable dentro de la gravedad" según han apuntado a este medio fuentes sanitarias del centro hospitalario Carlos III de Madrid, donde Teresa Romero permanece ingresada desde el pasado lunes. Según estas mismas fuentes, esta horas "son cruciales" en la evolución de su estado de salud, que ha mejorado debido a la bajada de la carga viral gracias a los nuevos sueros que le han suministrado. Romero pasó una grave crisis este jueves a última hora, pero durante la madrugada del viernes experimentó una ligera mejoría, que se mantuvo durante todo el viernes. Esto no quiere decir que la paciente esté fuera de peligro, ya que podría entrar en fase crítica en cualquier momento, según las mismas fuentes sanitarias. El centro hospitalario comunicó este viernes que Romero se encuentra estable dentro de la gravedad.
Romero continúa sedada y estaría respondiendo de forma positiva al nuevo tratamiento iniciado por los médicos, tras su empeoramiento del jueves
La primera infectada por ébola en Europa, que se contagió en una de las dos ocasiones que entró en la habitación del fallecido misionero García Viejo, está sedada y estaría respondiendo de forma positiva al nuevo tratamiento iniciado por los médicos, después de su repentino empeoramiento del miércoles por la noche. Su situación, no obstante, sigue siendo delicada, explican fuentes médicas consultadas por este periódico, pero su estado no se ha agravado en las últimas horas, pese a las informaciones que a última hora del jueves hablaban de que estaría "muy crítica".
El hospital ha recibido en las últimas horas el fármaco experimental Zmapp, traído desde Bélgica y que llevaba varios días agotado en todo el mundo, según han informado a Europa Press fuentes gubernamentales. Hasta ahora, la paciente estaba siendo tratada con un antiviral y con el suero extraído del plasma de la hermana Paciencia, que superó el virus el pasado mes de agosto y cuya sangre cuenta con anticuerpos del ébola. Las fuentes consultadas indican que la falta de explicación aparente a la evolución se debe al desconocimiento de la enfermedad y de las circunstacias del paciente, que hacen que cada persona responda al virus de forma diferente.
Nuevos ingresos
Un total de 17 personas permanecen ingresadas en el Hospital La Paz-Carlos III tras registrarse en la tarde de este viernes tres nuevos ingresos, el de una peluquera del centro de Alcorcón donde se depiló Teresa Romero, una enfermera y una limpiadora del centro de salud alcorcoreño donde acudió la auxiliar de enfermería contagiada por ébola.
De las 17 personas ingresadas en el citado centro hospitalario, hay un caso confirmado de contagio de ébola, el de la auxiliar de enfermería Teresa Romero, un caso en investigación correspondiente a una enfermera del equipo que atendió al misionero fallecido Manuel García Viejo y que está pendiente del resultado del segundo test tras dar el primero negativo, y quince personas consideradas como contactos de riesgo pero todos ellos asintomáticos.
Según el balance facilitado tras la primera reunión del Comité Especial para la gestión de la enfermedad bajo la presidencia de Soraya Sáenz de Santamaría, en la tarde de este viernes han ingresado en el centro hospitalario una nueva peluquera del centro donde se depiló Teresa cuando ya presentaba los primeros síntomas, otra enfermera de La Paz y una mujer del servicio de limpieza que trabajaba en el centro de salud de Alcorcón donde acudió Romero.
Además de estos tres nuevos ingresos, permanecen en la planta de vigilancia activa de contactos de alto riesgo el marido de Teresa, la médico del centro de salud y el facultativo de las Urgencias del hospital de Alcorcón que la atendieron, así como un médico procedente del hospital, que también había atendió a la auxiliar de enfermería, un sanitario del Summa, otras dos peluqueras que depilaron a Teresa, un médico, dos enfermeras, un enfermero supervisor y un celador.
Empeoramiento repentino
El estado de Romero había empeorado el miércoles "de forma alarmante", hasta el punto de que la Consejería de Sanidad de Madrid llegó a calificar de "crítica" su situación. El Hospital Carlos III desmintió a media tarde del jueves que la paciente hubiese sido intubada y que haya sufrido un fallo multiorgánico después del caos informativo vivido a lo largo de la jornada. La subdirectora del hospital donde Romero permanece ingresada desde el lunes por la noche, Yolanda Fuentes, explicó el jueves a las puertas del centro que solamente podía confirmar que la "situación clínica" de la paciente "ha empeorado" y que les han "prohibido expresamente dar más información" sobre su estado. "Hay que respetar su voluntad", añadió. El hermano de la paciente fue más lejos y aseguró a los periodistas que la infectada estaba intubada y que presenta problemas respiratorios. También dijo que los médicos creen que "no hay grandes" esperanzas sobre el estado de salud de Romero y que "está complicada la cosa".
Las dificultades respiratorias a las que hace referencia el hermano pueden venir de un aumento repentino de la fiebre, un shock séptico (infección) e incluso alguna hemorragia. Estos son los síntomas que acompañan a la enfermedad del ébola, junto con diarreas sanguinolentas y síntomas parecidos a los de la gripe, según ha podido saber Vozpópuli.
El mismo jueves por la mañana, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, había indicado que Romero se encontraba "algo mejor" y la carga de virus en su cuerpo al parecer no se estaba incrementando, gracias al suero que se le está aplicando.
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