La experiencia nos demuestra que Charlotte, la segunda hija recién nacida de los Duques de Cambridge, está llamada a ser la nueva oveja negra de la Familia Real británica -su hermano mayor tampoco se irá de rositas-. El gen de los Windsor parece tener un interés especial por las polémicas. Ni uno de los miembros de la casa se ha salvado de los escándalos y la historia no tiene viso de terminar. Como diría la folclórica más popular de las cárceles españolas, ¡la leña arde!