Los mayores de 30 años recordarán 'No te rías, que es peor', aquel concurso de TVE en el que los participantes habían de aguantar la risa escuchando chistes de una larga lista de humoristas si querían llevarse el premio final. Pues bien, un club de la comedia estadounidense ha llevado esta idea un paso más allá gracias al avance en las tecnologías de reconocimiento facial que permiten detectar cuándo alguien se ríe o está serio. ¿Cuál es la idea? Tan sencilla como pagar por lo que se consuma. ¿Que te ríes con las historias que escuchas? Pues pagas.