Para acabar con la libertad no hacen falta grandes dictadores ni convulsiones políticas: basta con el avance del conformismo y la sumisión. Este domingo asistiremos a otro paso de este penoso proceso en el País Vasco, pero dejémoslo par

Al final, ha sido el único candidato que ha conseguido suficientes apoyos para convertirse en líder de su partido y, por tanto, en primer ministro británico, algo que se debe en parte a la necesidad de evitar otra contienda por el liderazgo