El fuerte debate interno que mantienen pablistas y errejonistas en el seno de Podemos sobre el rumbo que debe tomar del partido ha llevado tal división de opiniones hasta el grupo parlamentario en el Congreso, tanto que apenas ha quedado diputado alguno sin alinearse con una u otra propuesta. De esta medición de fuerzas ha salido ganando el sector oficialista, el encabezado por el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, cuya mayoría avalaría cualquier cambio en el organigrama del grupo parlamentario después del cónclave de Vistalegre II, incluido el reemplazo de su portavoz, Íñigo Errejón.
Según el recuento realizado por Vozpópuli, Iglesias posee el apoyo de 25 de los 46 diputados que conforman el bloque de Podemos en la Cámara baja (los 71 son los que pertenecen al grupo confederal Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, esto es, incluyendo las confluencias, que aportan 25 diputados). Contando a Iglesias, los pablistas (26 actas) acaparan el 56,5% de la bancada violeta. En cambio, los errejonistas, identificados con una posición estratégica más moderada, no suman más de 17 actas, incluida la del propio Errejón (un 36,9%). Los tres parlamentarios restantes (el 6,5%) hasta los 46 son los únicos que han mantenido una posición más o menos neutral (la catalana Mar García Puig, la electa por Baleares, Mae de la Concha, y el gallego Antón Gómez-Reino).
De este modo, el secretario general y sus afines superan en 9 diputados a los que apuestan por un Podemos transversal y aperturista. Esta ventaja daría legitimidad a Iglesias para acometer los cambios que considere oportunos en el grupo parlamentario si su apuesta resulta ganadora en la próxima Asamblea estatal del partido (prevista del 10 al 12 de febrero). Y es que el partido morado, según fuentes internas, carece de un reglamento que deje en manos de sus diputados la elección de los puestos de dirección por debajo del presidente (portavoz, portavoz adjunto, secretario general y secretario general adjunto). Sólo la presión que puedan ejercer los representantes de las confluencias (En Comú, En Marea, Compromís y también Equo) jugaría a favor de la continuidad de Errejón como portavoz. Por contra, los ochos diputados de IU y sus marcas autonómicas (con Alberto Garzón, Yolanda Díaz y Ricardo Sixto como caras más visibles) se mueven en las mismas coordenadas que los pablistas.
El nombre que más suena como posible relevo de Errejón es de la cofundadora de Podemos y responsable de Análisis Político y Social, Carolina Bescansa. La socióloga ya ocupa un puesto destacado en la dirección del grupo parlamentario en la Cámara baja, siendo la secretaria genera del mismo. De hecho, fue ella quien presidió la reunión de trabajo que tuvieron los diputados morados el pasado 15 de diciembre. Aquel día, ni Pablo Iglesias ni Íñigo Errejón acudieron a la cita en sala Constitucional.
En una entrevista este martes en Antena 3, Bescansa señaló que "todos" en el partido morado son "sustituibles" y que "nadie es imprescindible", salvo Iglesias, de quien dijo que su liderazgo como secretario general no es discutido dentro de la organización.
Los 16 diputados que respaldan las tesis de Errejón son los 14 que ya firmaron el mes pasado el manifiesto Recuperar la ilusión: democracia para ganar (Ángela Ballester, Auxiliadora Honorato, Pablo Bustinduy, Segundo González, Ana Terrón, Rosana Alonso, Ángela Rodríguez, Tania Sánchez, Rosana Pastor, Alberto Montero, Juan Pedro Yllanes, Eduardo Maura, Miguel Vila y Sergio Pascual), la secretaria general de Podemos Euskadi, Nagua Alba, sobrina del filósofo Santiago Alba Rico, y el profesor Raimundo Viejo Viñas, que fue en la lista de En Comú Podem al 26-J.
El grupo parlamentario de Podemos carece de un reglamento que deje en manos de sus diputados la elección de los puestos de dirección
Por su parte, de los 25 parlamentarios que secundan a Iglesias hay 23 que lo han hecho expresamente formando parte del equipo Podemos para Todas, el vencedor en la última consulta a las bases sobre las reglas de juego de Vistalegre II. Son la propia Bescansa, Irene Montero, Juanma del Olmo, Rafael Mayoral, Alberto Rodríguez, Ana Marcello, Ione Belarra, Isabel Franco, Javier Sánchez, Txema Guijarro, Rita Bosaho, Amparo Botejara, Juan Antonio Delgado, Manolo Monereo, Diego Cañamero, José David Carracedo, Meri Pita, Teresa Arévalo, Eduardo Santos, Noelia Vera, Carmen Valido, Sara Carreño y Sofía Castañón).
Elizo, cuestionada
También se encuadra entre los pablistas la abogada Gloria Elizo, presidenta de la Comisión de Garantías del partido, que siempre ha estado vinculada al aparato. Recientemente ha sido criticada por los errejonistas al permitir que el senador Ramón Espinar mantenga tres cargos en contra de lo votado por las bases (no más de dos) en las primarias de Podemos Comunidad de Madrid.
Cierra la lista Pedro Arrojo, diputado por Zaragoza, quien, pese a no integrarse en Podemos para Todas, ha mostrado en los últimos días su coincidencia con varias advertencias lanzadas a los errejonistas por parte de firmes defensores de Iglesias, como Juan Carlos Monedero o Manolo Monereo. Por ejemplo, Arrojo ha difundido a través de las redes sociales un artículo de Monedero donde el exsecretario de Programa acusa al errejonista Sergio Pascual (actual miembro del equipo técnico de Vistalegre II) de "haber roto muchos puentes" durante su etapa como secretario de Organización.