La Unión Europea y los Gobiernos de los Veintiocho no reconocerán la Asamblea Constituyente salida de las elecciones del pasado domingo en Venezuela, que han sido boicoteadas por la oposición, aunque han evitado por ahora avanzar en sanciones contra dirigentes responsables de la crisis en Venezuela, tal y como ha reclamado España y rechazado países como Portugal y Grecia.
Los Veintiocho han instado al Gobierno de Nicolás Maduro a "tomar medidas urgentes para rectificar" y han avisado de que "la Unión Europea y sus Estados miembro están listos para aumentar gradualmente su respuesta en el caso de que los principios democráticos se socaven más y la Constitución de Venezuela no sean respetada" a través de una declaración de la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, consensuada previamente con los Veintiocho.