Sus nombres han sonado con fuerza en las últimas semanas como firmes aspirantes a ocupar una cartera ministerial. Algunos de ellos incluso han visto rotos sus sueños por segunda o tercera vez, ya que ese favoritismo en los pronósticos se quedó finalmente en humo. La tan ansiada lista de Mariano Rajoy repartió alegrías y decepciones por igual.
Entre los que tendrán que resignarse a esperar una nueva oportunidad figura el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Jorge Moragas, cuyo nombre ha aparecido con frecuencia en las listas de posibles ministrables, donde se le adjudicaba el Departamento de Exteriores, o bien la Portavocía del Gobierno.
Igual suerte han corrido Javier Maroto, vicesecretario de Acción Sectorial del PP; Pablo Casado, vicesecretario de Comunicación; y Andrea Levy, vicesecretaria de Estudios y Programas. Ellos representan el cambio generacional experimentado en los últimos años por el PP, pero Rajoy no ha depositado su confianza en ninguno de ellos para ocupar un asiento en el Consejo de Ministros.
Otro nombre que circuló en los medios de comunicación como futuro ministro fue el del secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, a quien le queda como consuelo felicitar a su hermano Álvaro, que ocupará la cartera de Energía, Turismo y Agenda Digital.
