Buenas noticias del Banco de España. La deuda pública ha bajado en noviembre en casi 5.000 millones, lo que deja el total de deuda en 1,098 billones de euros, el 99% del PIB. La cifra se queda así a cuatro décimas del objetivo anual, del 99,4%, así que parece bastante probable que el Gobierno cumpla sus previsiones.
Aunque la deuda sigue en máximos históricos, lo cierto es que lleva dos meses seguidos a la baja y, si finalmente se cumplen las previsiones, acabará el año por debajo del nivel registrado en 2015 en términos de PIB. Aunque el términos absolutos habrá subido en unos 30.000 millones de euros.
El grueso de la deuda en manos de las administraciones públicas se encuentra en valores a medio y largo plazo, que suponen tres cuartas partes de la deuda total. De hecho, estos préstamos aumentaron en 4.342 millones de euros respecto al mes anterior, hasta los 834.025 millones de euros.
La reducción de los créditos no comerciales explica el descenso de la deuda
La deuda pública en valores a corto plazo aumentó en noviembre en 475 millones de euros, hasta los 81.175 millones. En el último año, los valores a corto plazo en manos de las administraciones públicas se han incrementado en un 0,2%.
Por último, los créditos no comerciales y el resto de préstamos se redujeron en 9.603 millones de euros en noviembre, hasta los 183.404 millones de euros, por debajo de los 200.000 millones por cuarta vez en todo el año. Respecto al mismo periodo del año anterior, se han reducido un 10%.
