El presidente de BBVA, Francisco González, cree que no hay motivos para temer una destrucción de trabajo masiva por la digitalización. El banquero, presente durante este fin de semana en una reunión financiera en Singapur, pone de ejemplo a Japón y al propio Singapur, donde la tasa de paro son bajas a pesar de la importancia de la tecnología.
"La experiencia de todos esos países nos enseña cómo el progreso técnico se traduce en un mayor bienestar social", afirma González.
El primer ejecutivo de BBVA forma parte del Comité Asesor Internacional de la Autoridad Monetaria de Singapur, junto a otros banqueros como Axel Weber (UBS), Bill Winters (Standard Chartered), Jean Lemierre (BNP), John Cryan (Deutsche Bank) y Nobuyuki Hirano (The Bank of Tokyo-Mitsubishi UFJ).
"Yo soy un tecno-optimista", defiende González. "Los robots, la inteligencia artificial o el big data sustituirán algunos puestos, pero se creerán otros mejores. En el futuro habrá nuevos empleos que hoy no podemos ni imaginar. Muchos empleos serán más productivos, con lo que tendrán salarios más elevados".
"Habrá un período de transición. Lo esencial es gestionar el cambio, proteger a las personas y no los puestos de trabajo que queden obsoletos o las estructuras que impidan el progreso", añade.