El empresario Manuel Jove no quiere dejar pasar el apetito inversor existente por las energías renovables para dar una vuelta de timón a sus negocios y volver a apostar con fuerza por un sector que conoce a la perfección: el inmobiliario. Inveravante, el holding a través del que canaliza las inversiones el hombre que llegó a ser el primer accionista del BBVA, busca comprador para su cartera de activos eólicos, hidráulicos, fotovoltaicos y termosolares en Europa y América, por los que podría obtener hasta 1.000 millones de euros.
Según la información que adelantó este lunes la agencia Bloomberg, Inveravante ha contratado a Société Générale como asesor para la operación, que por ahora se encuentra en una fase preliminar. Fuentes del holding declinaron hacer comentarios sobre la noticia.
No obstante, según ha podido saber Vozpópuli, Jove ha tomado la decisión tras comprobar que su cartera de activos en renovables podría suscitar interés en el mercado, en el que ya hay unas cuantas carteras del sector con el cartel de "Se vende" colgado. A eso se añade su estrategia de volver a apostar con decisión por el ladrillo, un ámbito que nunca ha abandonado del todo pero que sí dejó en un discreto segundo plano durante la crisis.
Tras vender Fadesa, la inmobiliaria que fundó y sacó posteriormente a Bolsa, el empresario gallego centró sus inversiones en adquirir un 5% del capital de BBVA, mediante un complejo esquema de instrumentos derivados, y en la energía, con el desarrollo de activos renovables y también la adquisición de una participación en la petrolera canadiense Vetra.
Alianza con Anida (BBVA)
Fue precisamente el sector energético el que se hizo mayoritario en la cartera de su holding Inveravante, mucho más después de que diera por finalizada su etapa en BBVA. Sin embargo, desde hace poco más de un año ha vuelto a poner el foco en el sector inmobiliario, en el que durante todo este tiempo tuvo una presencia casi testimonial, con promociones muy seleccionadas en España, donde además conserva los terrenos ocupados actualmente por el Parque Warner, en la Comunidad de Madrid, y sus inmediaciones.
La actividad inmobiliaria de Inveravante se ha centrado en Marruecos, donde Manuel Jove es un destacado promotor, especialmente en el norte del país. El punto de inflexión llegó a finales del pasado año, cuando Inveravante se alió con Anida, la inmobiliaria del BBVA, para constituir una sociedad conjunta (denominada Avantespacia Inmobiliaria), de la que el empresario gallego controla un 70%.
Sus primeros planes pasan por promociones en diversos lugares de España para unas 850 viviendas. Una apuesta que Jove podría redoblar con parte de la liquidez que obtenga por la venta de sus activos energéticos renovables, toda vez que seguirá conservando el negocio petrolero.
En los últimos meses, el sector inmobiliario, incluso el residencial, está mostrando síntomas de una recuperación que parece notablemente firme. Los recuerdos de los efectos de la crisis se han disipado y son numerosas las compañías que tienen ambiciosos planes para relanzar la promoción en España. Un tren que no quiere perder alguien que conoce como nadie el sector.