José Ignacio Goirigolzarri y Carlos Egea, presidente de Bankia y BMN, respectivamente, tienen mucho trabajo por delante en caso de que el Frob dé el visto bueno a su fusión a mediados de 2017. Las dos entidades nacionalizadas figuran entre las que mayor golpe están sufriendo en sus ingresos este año. Y ahí es donde está la guerra bancaria actualmente: sostener los márgenes en un entorno competitivo feroz y con tipos de interés en negativo.
En lo que llevamos de año, a las dos entidades les está costando lidiar con este mercado. De entre todos los bancos cotizados que ya han presentado resultados del tercer trimestre (todos salvo Liberbank, que lo hace el jueves), Bankia es el que mayor recorte sufre en sus márgenes, de en torno al 16%. Depurando la cifra al negocio bancario puro y duro (dar préstamos y captar depósitos), la entidad heredera de Caja Madrid y Bancaja también es la que más ha dejado de cobrar en sus créditos, al pasar de los 203 puntos básicos que se apuntaba a finales de 2015 a los 161 puntos anunciados la semana pasada.
Aunque BMN todavía no ha presentado sus cuentas del tercer trimestre, las de mitad de año reflejaban una tendencia similar en el margen de clientes e incluso más acentuada en el de intereses: con un desplome del 20% en el arranque de 2016.
Tanto Bankia como BMN parten con desventaja frente al resto de bancos, ya que tienen en su balance los bonos que recibieron de Sareb a cambio de sus activos inmobiliarios. Entre las dos entidades tienen 22.000 millones 'prestados' al banco malo que les renta prácticamente un 0%. El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, explicó en resultados que sus 17.000 millones en bonos de Sareb les ha aportado apenas 20 millones a la línea ingresos durante este año.
Las hipotecas heredadas de Caja Madrid y la inexistente rentabilidad de los bonos de Sareb lastran los márgenes de Bankia
Otra dificultad añadida, ésta más acusada en el caso de Bankia, son las hipotecas heredadas de Caja Madrid durante el peor momento de la burbuja inmobiliaria. Muchas se concedieron con un diferencial sobre el euribor inferior al 0,4%. El banco está perdiendo dinero con estos créditos dado el nivel del euribor, que está seis décimas en negativo.
Junto a este obstáculo, está el de las cláusulas suelo. A pesar de que Bankia ya las eliminó a todos sus clientes -unos 30.000-, los juicios por estas condiciones hipotecarias podría hacer más daño a BMN. La entidad procedente de la fusión de Caja Murcia, Granada, Sa Nostra y Penedès tiene un resultado más ajustado (de 32 millones en el primer semestre), lo que le da menos margen de maniobra para aguantar imprevistos. Por ello, será clave lo que decida el Tribunal de Justicia de la Unión Europea sobre la retroactividad total en las sentencias de estas cláusulas.
Al margen de estas debilidades, hay dos puntos que invitan al optimismo. El primero, que según el número dos de Bankia "estamos cerca de un suelo en márgenes y en los próximos trimestres estaremos en un entorno más estable". "Ya dijimos que teníamos que prepararnos para una travesía por el desierto, pero lo que se ha producido es peor de lo esperado", añadió la semana pasada Sevilla. El otro factor es que tanto Bankia como BMN parten con ventaja frente a sus competidores en términos de eficiencia (llevaron a cabo el ajuste de plantilla y oficinas en 2013 por imposición de Bruselas) y tienen menos carga del ladrillo al haber pasado la mayor parte a Sareb.
Resto del sector
Las caídas de márgenes son algo común en el resto del sector. Junto a Bankia y BMN, las entidades cotizadas que más recortes de ingresos están sufriendo son Banco Santander y Banco Popular. El banco presidido por Ana Botín anunció un desplome del margen de intereses en España del 12,1%, en parte debido a la Cuenta 1, 2, 3, que remunera con hasta un 3% a sus clientes en función de unas condiciones.
Por su parte, Popular reduce el frenazo del margen de intereses hasta el 6,3%, pero donde más está notando la elevada competencia en su nicho de negocio (pymes) es en el margen de cliente. La entidad presidida por Ángel Ron ha cedido este año el cetro como grupo que más dinero ganaba con el negocio 'core' en detrimento de Banco Sabadell. Popular ha pasado de cobrar de media 297 puntos básicos por sus créditos en 2015 a 265 puntos en septiembre.