Es lo que se conoce como la famosa ‘carta naranja’ de las pensiones. Un sistema que ya se aplica en numerosos países de la UE y que el Gobierno se comprometió a enviar a los mayores de 50 años cuando llegó al poder. Pero no lo hizo. El su lugar, planteó un simulador electrónico en la web ‘Tu Seguridad Social’, en el que se puede calcular más o menos cómo será la prestación de los futuros jubilados. Eso sí, con limitaciones y dificultades técnicas.
Los expertos tienen claro que el Gobierno paró el envío de esta carta por motivos electorales, porque la información que contenía no era muy positiva para los ciudadanos. Sin embargo, creen que es la forma perfecta de concienciar a la gente del problema de las pensiones y dejar que tomen decisiones a tiempo. De hecho, casi todos creen que esta información debería enviarse mucho antes de los 50 años, porque en ese momento ya es tarde para empezar a planificar la jubilación.
En otros países de la UE, esta ‘carta naranja’ se envía mucho antes. Por ejemplo, en Francia se manda a partir de los 35 años, una edad más razonable para tomar decisiones de ahorro, y en Suecia se manda a partir de los 18 años si los ciudadanos ya están trabajando. En la carta se les explica cuál es el valor actualizado de las cotizaciones que han realizado y el trabajador puede decidir retirarse a partir de los 61 años, total o parcialmente (es decir, podría elegir cobrar parte de la pensión y seguir trabajando unos años más).
Inverco sostiene que la carta es la forma perfecta para dar margen a los ciudadanos a ahorrar para cuando se jubilen
El presidente de Inverco, Ángel Martínez Aldama, cree que el envío de esta carta serviría para tener conciencia de cuáles serán los ingresos en el futuro. “Sólo así, sabiendo lo que cada uno cobrará en su jubilación, habrá margen para mantener el nivel de vida en la jubilación”, señaló esta semana en desayuno organizado por www.estrategiasdeinversion.com en la Bolsa de Madrid.
Según la última encuesta de BBVA, tres de cada cuatro españoles está preocupado por el futuro de las pensiones, pero siete de cada diez no está ahorrando para la jubilación. Y uno de cada dos pide ayuda a expertos porque no tiene conocimientos para tomar decisiones en este sentido. De hecho, según un estudio de Aegón, los españoles son, junto a los japonenes y los húngaros, los que menos preparan la jubilación.
El presidente del Comité de Comunicación de EFPA España, Enrique Borrajeros, cree que hay más razones por las que los ciudadanos no son conscientes del problema de las pensiones. Además de no haber recibido la información adecuada, la gente sobreestima la capacidad de ahorro que tendrá en el futuro y dedica poco tiempo a pensar en esto. A su parecer, los españoles tienden a aplazar los problemas pensando que hay una rentabilidad razonable sin riesgo, que la vivienda es el mejor plan de pensiones y que las prestaciones están garantizadas.
Fedea apuesta por canalizar el ahorro a formas que permiten completar la pensión en el futuro
El director de Fedea, Ángel de la Fuente, va más allá y asegura que el inversor español ahorra, pero para invertir en ladrillo, algo que no aporta mucha liquidez en la jubilación. “Quizás no habría que debatir tanto sobre los planes que hay que tener, sino intentar que el ahorro se canalice hacia formas más líquidas a cierta edad, desarrollar hipotecas inversas y demás mecanismos que permitan que los mayores que tengan algo de patrimonio pero renta baja, consigan transformarlo”, subraya.
Lo que todos tienen claro es que España va hacia un sistema de pensiones sostenible, pero menos generoso. Por eso, es probable que todos los ciudadanos quieran o incluso necesiten complementar su jubilación con un plan privado. El profesor del IEB Julio Fernández García asegura que las reformas que se han hecho hasta ahora no son suficientes para garantizar pensiones similares al último salario que se cobra.
La pensión será el 50% del último salario en el año 2060
De hecho, la tasa de sustitución (pensión en comparación con el último salario), que ha llegado incluso al 90%, ya se está reduciendo progresivamente. Actualmente está en el 83% y bajará al 50% en 2060, según los datos de la Comisión Europea. La media de la OCDE está en el 60%. Y es que, tal y como explica el director de relaciones institucionales del departamento de previsión colectiva de Santander AM España, Ricardo Calle, si ahora “hay más de dos cotizantes por pensionista, en el futuro habrá un solo cotizante por cada pensionista.
Hay muchas propuestas sobre la mesa para reformar el actual sistema público con el objetivo de hacerlo más sostenible en el futuro. Algunos apuestan por mejorar sus ingresos vía impuestos o alargando la edad de jubilación. Otros centran sus propuestas en la necesidad de incrementar la natalidad y mejorar la conciliación para solucionar el problema demográfico. Y cada vez hay más voces, sobre todo en el sector privado, que avisan de que los ciudadanos solo tendrán pensionistas dignas si compatibilizan sus pensiones con planes privados.