El permiso por paternidad para el cuidado de hijos en casos de nacimiento, adopción o acogida dura un mes desde el 1 de enero. La medida ha tardado años en llegar: se anunció en 2011, pero se ha ido postergando año a año por la crisis económica. Finalmente entró en vigor con la prórroga presupuestaria gracias al acuerdo que alcanzaron el Partido Popular y Ciudadanos cuando negociaron la investidura fallida tras las elecciones de junio.
Cuando se formó Gobierno meses después, el PP quiso mantener la propuesta porque necesita la 'formación naranja' para gobernar. En realidad, la Ley que permitía el aumento del permiso a un mes se aprobó en el año 2009 y fijaba el cambio para el 1 de enero de 2011. Hoy por fin es una realidad. ¿Pero es igual para todos? Lo cierto es que no.
Los funcionarios y empleados públicos no se rigen por el Estatuto de los Trabajadores, sino por el Estado Básico del Empleado Público y esto supone una serie de diferencias a la hora de acceder a este permiso. Por ejemplo, un empleado del sector privado puede utilizar esta baja en cualquier momento de las 16 semanas siguientes al nacimiento del niño. Los funcionarios solo pueden hacerlo a continuación del parto.
Los funcionarios no disfrutan del permiso ampliado cuando se produce un parto múltiple
Pero hay más diferencias. Cuando se produce un parto múltiple y se tienen mellizos o gemelos, los asalariados del sector privado pueden disfrutar de un permiso ampliado, una posibilidad que no contempla el Estatuto Básico del Empleado Público. Y tampoco regula la posibilidad de disfrutar del permiso en régimen de jornada parcial, como sí pueden hacer el resto de trabajadores.
Son pequeñas diferencias, pero lo cierto es que esta medida, que lleva reclamándose años, no beneficia por igual a todos los trabajadores. Por eso los sindicatos del sector público van a reclamar cambios en su Estatuto para equiparar los derechos y han presentado una queja ante el Defensor del Pueblo por la discriminación que sufre el colectivo de funcionarios en este sentido.
Ampliación a 16 semanas
Los sindicatos quieren resolver este asunto lo antes posible por si el Gobierno decide dar más pasos hacia delante. Lo cierto es que la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha dejado claro en numerosas ocasiones que su intención es seguir ampliando el permiso por paternidad a lo largo de la legislatura hasta igualarlo con el de la mujer, que actualmente dura 16 semanas.
La ampliación a cuatro semanas ha costado 235 millones. Llevarlo a 16 semanas costaría unos 1.400 millones, según los cálculos de la Plataforma por Permisos Iguales e Intransferibles de Nacimiento y Adopción (PPiiNA), aunque el Gobierno dice que la cantidad sería mayor y que, de momento, no está en condiciones de hacerlo. Quiere esperar un poco.
El Gobierno quiere ampliar el permiso a 16 semanas a lo largo de la legislatura para igualarlo con el de la mujer
En cualquier caso, PPiiNA cree que no basta con ampliarlo a 16 semanas, sino que el objetivo tiene que ser establecer permisos exactamente iguales e intransferibles. Ellos proponen dos permisos de 16 semanas, con seis de carácter obligatorio y 10 optativas, pero intransferibles. Esto quiere decir que si el hombre o la mujer renunciara a cogerse toda la baja, no podría transferirla al otro, simplemente se perdería.
Y esto es diferente a lo que plantea Ciudadanos. La formación naranja habla de dos permisos de 16 semanas, pero no intransferibles, lo que podría hacer que muchos hombres tendieran a ceder parte de su baja a las mujeres y se avanzaría poco en términos de reducción de la desigualdad. En cualquier caso, dada la situación actual de las cuentas públicas y la debilidad del Gobierno, parece poco probable que el PP se anime a dar más pasos en este sentido. Al menos de momento.