Pase lo que pase, tendrá que ocurrir antes de 2015. Al menos esa es la intención de los implicados. Los directivos de Unidad Editorial y Vocento no quieren demorar demasiado sus negociaciones para una posible fusión de ambos grupos de comunicación. Y, según fuentes consultadas por este diario, unos y otros se han fijado como meta decidir antes de que acabe el año en curso. En todo caso, las conversaciones se acelerarán aun más a partir de septiembre. De las diferentes posibilidades, ahora mismo parece más cercana una alianza estratégica entre ambos que no conlleve obligatoriamente la fusión de sus cabeceras, o no al menos de forma inmediata. Como es sabido, si dicha operación llega a buen puerto y El Mundo pierde su identidad actual, Pedro J. Ramírez creará una cabecera, como anunció a principios de este verano.
En puridad, se trataría más bien de una absorción, teniendo en cuenta que Vocento tiene una mejor posición en el mercado y que, no puede olvidarse, la antigua Unedisa está en manos del grupo italiano Rizzoli
A finales de julio se celebró una reunión clave para que esta operación fructifique. En el consejo de administración de Vocento se abordó por primera vez la alianza con Unidad Editorial. Como ha ido narrando Vozpópuli en los últimos meses, los cambios acaecidos al frente del grupo editor de ABC favorecen sobremanera la opción de una alianza. Y es que el sector que tiene el mando en el grupo, con Rodrigo Echenique como presidente apoyado incondicionalmente por las familias Urrutia y Bergareche, así como por Jaime Castellanos, es el que prefiere aliarse con el grupo editor de El Mundo, Marca y Expansión. En puridad, se trataría más bien de una absorción, teniendo en cuenta que Vocento tiene una mejor posición en el mercado y que, no puede olvidarse, la antigua Unedisa está en manos del grupo italiano Rizzoli Corriere della Sera (RCS) Mediagroup, que ya hace tiempo que quiere deshacerse de su ramificación española.
En los seis primeros meses de 2014, Vocento perdió 4,1 millones de euros y Unidad Editorial se dejó la friolera de 16 millones, según las cuentas que han hecho públicas los conglomerados mediáticos
La operación trae causa, en gran medida, de las dificultades económicas que atraviesa todo el sector de los medios, en general, y los dos grupos implicados, en particular. El descenso de las ventas de ejemplares en los quioscos parece no tener fin. Y, en paralelo, continúa una crisis publicitaria demoledora que no se resolverá en 2014 según todos los analistas; de hecho, los más optimistas hablan de un tímido crecimiento en los anuncios que en ningún caso se dará en los medios impresos. Sin ir más lejos, en los seis primeros meses de 2014, Vocento perdió 4,1 millones de euros y Unidad Editorial se dejó la friolera de 16 millones, según las cuentas que han hecho públicas los conglomerados mediáticos. Cifras que, por cierto, colocan a la compañía de capital vasco en una posición negociadora mucho más ventajosa.
A por los beneficios perdidos
En este contexto, unos y otros entienden que es hora de alcanzar un acuerdo que permita la creación de un conglomerado mediático más sólido que pueda obtener beneficios a corto plazo. Las fuentes consultadas cuentan que en estas conversaciones se van a plantear varias hipótesis. Una es la venta de parte de Unidad Editorial a Vocento. Es decir, el grupo de capital vasco se haría con algunos de los activos de su competidor, como El Mundo, Marca o Expansión; de concretarse esta posibilidad, los diarios ABC y El Mundo estarían abocados a una fusión. La otra opción sobre la mesa es una alianza estratégica entre ambos conglomerados, de forma que no necesariamente habría fusión entre diferentes periódicos, sino que todos ellos seguirían editándose, al menos de forma temporal. En un principio, parecía más probable que Vocento adquiriese el rotativo fundado por Pedro J., pero ahora las fuentes mencionadas aseguran que es más plausible la segunda opción. En todo caso, arguyen, hay que esperar a que transcurra el período mencionado.
Los llamados a encabezar las negociaciones son Antonio Fernández-Galiano, presidente de Unidad Editorial, y Luis Enríquez, consejero delegado de Vocento y ex del otro grupo. Aunque ninguno de ellos tendrá la última palabra, lógicamente. Pese a que parezca que casi todo son dudas en esta operación en marcha, sí existe la certeza de que ambos grupos quieren aliarse. Y, en el caso de Unidad Editorial, se trata de una necesidad casi imperiosa para sobrevivir. Meses atrás Vozpópuli desveló que los propietarios italianos ya ofrecieron Unidad Editorial al grupo Planeta, que rechazó la operación. En varias ocasiones, el propio Galiano ha dicho públicamente que las fusiones son "inevitables" y que no hay espacio para tantos diarios de centroderecha.
Si finalmente hay fumata blanca y se produce la fusión tantas veces ansiada, habrá otro movimiento en el siempre convulso panorama mediático. Y es que Pedro J. ha dejado claro que volverá con una nueva cabecera "si El Mundo deja de ser El Mundo". Tiempo al tiempo.
