Un nuevo frente se ha abierto en la guerra que mantienen las televisiones privadas con la Liga de Fútbol Profesional. Atresmedia y Mediaset han presentado recientemente un escrito ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia en el que solicitan que el regulador actúe para poner freno a las maniobras que ha realizado la asociación dirigida por Javier Tebas para impedirles tomar imágenes correctamente de los partidos de la Liga Santander. En su opinión, la LFP incumple la normativa vigente con este tipo de maniobras, por lo que piden al regulador que tome cartas en el asunto, ante el perjuicio que suponen estas acciones para sus informativos y programas deportivos.
Las diferencias que mantienen desde verano de 2015 las televisiones privadas y Tebas se acrecentaron hace unas semanas, cuando la LFP vetó el acceso de las cámaras de Atresmedia y Mediaset a los estadios de primera y segunda división. La asociación tomó esta decisión porque, a su juicio, estas empresas habían sobrepasado algunas líneas rojas a la hora de informar sobre los partidos.
Por un lado, en los resúmenes de los encuentros habían alternado imágenes grabadas por sus propias cámaras con las que les proporciona Mediapro, algo que la asociación presidida por Tebas sostiene que está prohibido, en cuanto a que tienen que elegir entre unas y otras. La Liga también consideraba irregular que estas empresas no retiraran de sus páginas web los programas en los que se emiten estos resúmenes una vez habían transcurrido 24 horas tras la finalización del partido.
La organización deportiva también trasladó a estas compañías su disconformidad porque ofrecieran en sus programas las imágenes grabadas con sus cámaras después de este período de 24 horas. A juicio de La Liga, esto vulnera los términos de la normativa audiovisual.
El pasado 8 de marzo, la Sala de Supervisión Regulatoria de la CNMC acordó abrir un expediente sancionador contra la LFP por estos hechos para estudiar si el 'boicot' a las televisiones privadas constituye una infracción “grave” (multa de hasta 500.000 euros). En paralelo, emitió un requerimiento en el que exigía a Javier Tebas que garantizara el acceso a los campos de fútbol tanto a los periodistas como los medios gráficos de las televisiones privadas.
En caso de incumplir este requerimiento, la organización encabezada por Tebas se enfrentaría a multas de 20.000 euros por día de competición durante las dos primeras semanas y, pasado este período, de 30.000 euros hasta que la LFP permitiera el acceso de Mediaset a los recintos.
"Tebas sigue sin cumplir la normativa"
Según han explicado a Vozpópuli fuentes conocedoras de este conflicto, en el escrito que Atresmedia y Mediaset han presentado ante este organismo inciden en que Tebas sigue sin cumplir la normativa. Entre otras cosas, porque durante las dos últimas jornadas del campeonato liguero les ha impedido grabar a pie de campo. También porque sólo ha concedido la acreditación a una cámara por cada una de estas empresas, cuando –sostienen-, tienen derecho a que entren dos. En el caso de Atresmedia, una por parte de Antena 3 y otra por La Sexta; y, en el caso de Mediaset, una por Telecinco y la otra por Cuatro.
Obligar a las televisiones a realizar las coberturas de los partidos con una sola cámara dificulta sobremanera su tarea, que comprende la obtención de imágenes de las jugadas más destacadas para sus informativos, pero también de gestos y reacciones de los jugadores y del público para programas de debate como El Chiringuito de Jugones, han explicado fuentes del sector audiovisual.
No hay que olvidar que las televisiones privadas tienen derecho a acceder a los campos de fútbol para ofrecer imágenes de los partidos en sus programas informativos. Esto es así en virtud de una resolución de la CNMC de enero de 2016.
La propietaria de los resúmenes de LaLiga es Mediapro (Jaume Roures), que tiene la potestad de revender estas imágenes a varios operadores. Sin embargo, quienes no tienen este producto audiovisual –como Atresmedia y Mediaset- pueden emitir en sus canales 90 segundos de cada encuentro, hasta 24 horas después de su finalización. En opinión de las televisiones privadas, la LFP no está cumpliendo este precepto, de ahí que hayan pedido a la CNMC que actúe al respecto.