La DUI en diferido realizada este martes por el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en el Parlament no era la que esperaba la CUP. De ahí que tal movimiento del jefe del Govern haya tenido una respuesta contundente por parte de sus socios. La coalición anticapitalista anunció anoche que rompe de facto su alianza con Junts Pel Sí (PDCat y ERC), dejándole en minoría parlamentaria, y que está dispuesta a forzar elecciones anticipadas si no se proclama la "República catalana" dentro de un mes aproximadamente.
Los 10 diputados de la CUP suspenderán su actividad parlamentaria, y por tanto, cualquier apoyo a Junts Pel Sí en el Parlament "hasta que no se den pasos firmes hacia la República". Sólo falta que el consejo político de la formación anticapitalista dé el visto bueno a este plante, que durará mientras la DUI no tenga efectos jurídicos.
Así mismo, la CUP exigió a Puigdemont que acote en el tiempo las negociaciones que pretende emprender con el Gobierno central, ya que el presidente de la Generalitat sólo se refirió a la "próximas semanas" durante su discurso. "Encontraríamos normal que fuera un límite de un mes más o menos", señaló el portavoz del secretariado nacional de la CUP, Quim Arrufat, en rueda de prensa.
Y es que miembros del Govern trasladaron a la ANC y Òmnium Cultural, las dos principales plataformas independentistas, que esa disposición al diálogo con el Estado no se prolongará más allá de "tres semanas", según fuentes de dichas entidades civiles. Arrufat buscó este martes tranquilizar a su parroquia con el mensaje de que "no permitiremos que esta legislatura acabe sin la aplicación de los resultados del reférendum y utilizaremos, por tanto, los medios que están a nuestra disposición", avisó.
La confianza de la CUP en el Ejecutivo catalán "ha quedado tocada", reconoció Arrufat. De este modo, expresó la "decepción" y el "desconcierto" que había sentido su formación "y mucha gente de Cataluña" por el desarrollo del pleno del Parlament. "Hemos vivido una jornada paradójica, porque veníamos a proclamar la República y, quien la ha proclamado es (el presidente del Gobierno español) Mariano Rajoy", en alusión a los primeros movimientos de Moncloa.
"No ha sido el pleno en el que habíamos trabajado con el Govern y con Junts Pel Sí y que entendíamos que correspondía después del referéndum y de la huelga general del 3 de octubre, pero una hora antes del pleno se han cambiado todos los guiones", admitió el portavoz del secretariado nacional de la CUP.
Arrufat criticó que la Generalitat no dé cumplimiento a la "Ley del referéndum", que exige que el Parlament declare la independencia 48 horas después de la proclamación oficial de los resultados. A juicio de la CUP, esto no se ha hecho, por lo que el presidente catalán deberá explicárselo a ellos y a los ciudadanos.
"Escasa validez"
Pese a que los 10 diputados cupaires estamparon su firma en el documento suscrito tras la sesión del Parlament, la coalición anticapitalista no cree que se haya declarado la DUI. Ese documento tiene "escasa validez: tiene validez política para el día en que se apruebe con todos sus efectos jurídicos, y para eso se tiene que levantar la suspensión y llevarla a sede parlamentaria para hacerla efectiva", comentó Arrufat. La CUP confía en que se convoque otro pleno con tales fines dentro de un mes.
Preguntado por lo que hará su organización en caso de que Puigdemont no proclame la "República catalana" en un tiempo aceptable para ellos, el portavoz del secretariado nacional de la CUP advirtió que movilizarán a la ciudadanía para lograrlo desde la calle.