El presidente del Gobierno no ha querido dar saltos en el vacío y ha apostado por la continuidad en su equipo económico en una legislatura que necesitará de continuos pactos pero que tendrá como línea roja el respeto a los acuerdos de estabilidad presupuestaria comprometidos con Bruselas. Ello explica la consolidación de Cristóbal Montoro como ministro de Hacienda, la cartera desde la que ha cimentado el grueso de la recuperación económica a través de un ajuste que ha reducido el déficit desde el 9,3 % heredado del anterior equipo socialista hasta el 4,6 previsto para finales de este año. Buena parte de la arquitectura en la que Montoro ha hecho descansar el saneamiento de las cuentas públicas ha tenido también como protagonistas a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos a través de mecanismos de rescate como el Fondo de Liquidez Autonómica y el plan de pago a proveedores.
Álvaro Nadal entra en el equipo económico como responsable de Energía y Turismo
Montoro podrá gestionar desde ahora Hacienda sin parte de los problemas que le generó durante la anterior legislatura el área de Administraciones Públicas, pues en la nueva estructura de Gobierno Rajoy lo ha traspasado al territorio de Soraya Sáenz de Santamaría, que retiene también la vicepresidencia. No obstante, dentro de la cartera de Montoro se ha introducido la política de la función pública.
El otro gran pilar del equipo económico continuará siendo Luis de Guindos, quien además de la cartera de Economía y Competitividad amplía a partir de ahora sus competencias a Industria, cartera que desempeñó en funciones desde la salida de José Manuel Soria el pasado abril. Guindos aspiraba a ser vicepresidente económico, para tener bajo su control también las políticas de Hacienda, empleo, Agricultura y también las de Fomento, el principal Ministerio del gasto. Sin embargo, Rajoy no le ha concedido este galardón, aunque le retiene en el Gobierno para que siga administrando, sobre todo, las antenas de Bruselas.
Fátima Báñez se afianza en la cartera de Empleo, desde la que ha dirigido en la X legislatura la última reforma laboral. Rajoy está satisfecho de su gestión al frente del Ministerio y ha preferido no moverla a otra responsabilidad para un mandato en el que se ha comprometido a que trabajen en España 20 millones de personas.
El presidente ha elegido para Fomento al alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, cartera desde la que deberá gestionar un presupuesto global que roza los 20.000 millones de euros, la mitad de ellos en el capítulo de inversión. Esta responsabilidad fue abandonada por Ana Pastor desde su nombramiento en julio pasado como presidenta del Congreso y ha recaído hasta ahora de forma interina en Rafael Catalá.
La cartera de Fomento le ha sido confiada al hasta ahora alcalde de Santander, Iñigo de la Serna
Isabel Tejerina no se mueve de Agricultura, Ministerio en el que ya era la ‘número dos’ cuando Miguel Arias Cañete lo abandonó en 2014 para incorporarse a la comisaría de Energía y Cambio Climático en Bruselas. Esta último área ha sido convertido por Rajoy en un Ministerio, al frente del cual ha colocado al hasta ahora jefe de la Oficina Económica, Álvaro Nadal, que asume también Comercio.