A diferencia del PP, a Ciudadanos se le achaca una falta de estructura y cuadros medios formados. En contraposición, los de Albert Rivera cuentan con una mejor imagen a nivel nacional. Al menos a eso apuntan los últimos sondeos, sobre todo, a raíz de los buenos resultados obtenidos por la formación naranja en las elecciones del pasado 21 de diciembre en Cataluña, pues podría haber un efecto contagio.
Los datos logrados en esa comunidad le han convertido en la alternativa política más fuerte para enfrentarse al desafío secesionista, pero también han servido al partido para allanar el terreno en las regiones donde aún no se han expandido y escasean de alcaldes y, por supuesto, de presidentes regionales.
Pero Emmanuel Macron, aquel economista sin experiencia electoral al frente del movimiento de La República en Marcha (LREM), tampoco los tenía y terminó escalando a la presidencia de Francia en un tiempo récord, un éxito que Rivera tiene muy presente y no duda en recordar cada vez que le señalan la falta de estructura territorial como principal hándicap para acceder a La Moncloa. Y si a Macron le benefició el mensaje antiinmigración, anti Unión Europea y antisistema de su rival Marine Le Pen, a Ciudadanos parece estar beneficiándole el nerviosismo del PP tras el batacazo en los comicios catalanes.
La 'OPA' de Ciudadanos
Conscientes de que los populares les está costando retomar el pulso político tras el 21D, Ciudadanos, en auge, prepara el 'sorpasso' con una 'OPA' a los desencantados del PP. Esta misma semana fuentes del partido aseguraban a este medio que la formación no se cerraba "a nada" a la hora de recibir ofertas de políticos de partidos como el PP, incluidos ex dirigentes, aunque aclaraban que no estaban "buscando ni recibiendo este tipo de ofertas".
Sin embargo, la crisis que atraviesa en la actualidad el PP de Jaén, y que ha puesto en jaque a los populares andaluces, invita a pensar que el contacto entre miembros de una formación y otra para propiciar el traspaso es real. En total, ocho de los 26 alcaldes de la provincia de Jaén estarían dispuestos a encabezar las listas que la formación naranja en mayo de 2019 si el PP andaluz no atiende a sus reivindicaciones, que consisten en reconocer la "cadena de irregularidades" e "incumplimientos" que, según el sector crítico, habrían acontecido en el congreso provincial del PP donde se barajaba la presidencia del partido que, finalmente, recayó en el Juan Diego Requena.
La crisis que atraviesa en la actualidad el PP de Jaén, y que ha puesto en jaque a los populares andaluces, invita a pensar que el contacto entre disidentes y Ciudadanos está a la orden del día
Según asegura a este diario el alcalde de Porcuna, Miguel Moreno, quien abandera el movimiento disidente -y que también forma parte del Comité Ejecutivo Provincial del PP de Jaén y del Comité Ejecutivo Territorial de este partido en Andalucía- si antes del 25 de enero no se abre un expediente disciplinario al expresidente provincial y actual secretario de Estado de Hacienda, José Enrique Fernández de Moya, a quien estos 'desencantados' consideran "el principal artífice del pucherazo en Jaén", el PP de esta provincia podría terminar desatomizado en favor de Ciudadanos.
Además, continúa, piden la celebración de un congreso con garantías, revisar las estructuras locales y la integración de la corriente crítica en los órganos de dirección del PP de Jaén. Según alertan fuentes del partido, se trata del primer aviso de fuga al PP de Andalucía pero no sería el único y citan otras provincias como Granada o Sevilla como ejemplos en los que se están produciendo tomas de contacto entre regidores populares con la formación naranja. "También nos han tanteado desde Ciudadanos sabiendo que estamos en plena crisis", reconocen algunos disidentes.
Nuevas Generaciones
Pero aparte de las dificultades internas que puedan surgir en el partido, sobre todo entre miembros con trayectorias políticas de gran recorrido, al PP se enfrenta en los últimos tiempos a la amenaza que supone la pérdida de afiliados de Nuevas Generaciones (NNGG), que estarían encontrando más posibilidades de "hacer carrera" en un partido emergente que uno de los considerados tradicionales.
Aunque Ciudadanos, partido con 10 años de vida en Cataluña, goza de un atractivo indudable para los descontentos con el PP, y además cuenta con las alabanzas públicas del ex presidente José María Aznar, tiene presente que la labor de expandirse en territorios como Galicia o País Vasco será ardua. Cabe recordar que el 25 de septiembre de 2016, la formación de Albert Rivera no consiguió ningún escaño en ninguna de las dos comunidades, una caída sin paliativos en su estrategia de consolidación territorial. ¿El efecto Cataluña contagiará tanto como apuntan algunas encuestas? Rivera ya se prepara para 2019 convencido de que ganarán muchas más alcaldías de las que disponen ahora.