La dirección del PSOE va a ser comprensiva con el hoy senador José Montilla en su condición de expresident de la Generalitat, y no le presionará para que mañana, viernes, vote a favor de las medidas propuestas por el Gobierno y destinadas a intervenir esa comunidad al amparo del artículo 155 de la Constitución, según han explicado a Vozpópuli fuentes socialistas.
En ese asunto, Ferraz quiere ir de la mano del PSC, cuyo primer secretario, Miquel Iceta, ya dejó claro anteayer que apoyará la "decisión personal" que adopte Montilla. Según Iceta, éste decidirá en su triple condición de militante "orgulloso" del PSC, senador y presidente de la Generalitat durante cuatro años "magníficos". Y contará con el apoyo de su partido y "de sus amigos", entre los que se incluye el líder de los socialistas catalanes.
Ni el PSOE ni el PSC adelantan qué hará Montilla y, después de que Iceta aludiera al precepto constitucional que descarta el "mandato imperativo" para diputados y senadores, en Ferraz se acogen a que el expresident se encuentra ante una "situación complicada" que es necesario entender.
El pasado lunes, el portavoz de la Ejecutiva, Óscar Puente, aseguró que la dirección confía en que todos los 62 senadores socialistas votarán lo mismo, pero, a día de hoy, nadie descarta que Montilla pueda desmarcarse del apoyo a la intervención del Gobierno que presidió. Y el mensaje que se lanza desde Madrid es de comprensión.
El aludido, por su parte, sigue sin desvelar cual será el sentido de su voto. No lo hizo el martes por la tarde durante las comparecencias de todos los senadores de designación autonómica ante el Parlament de Cataluña y no lo ha hecho después.
En Ferraz se acogen a que el expresident se encuentra ante una "situación complicada" que es necesario entender
Desde la dirección federal se reconoce que la situación del PSC es muy complicada y conviene no tensionarla más con una exigencia que puede ser comprendida fuera de Cataluña, pero no allí. No en vano, la alcaldesa de Santa Coloma de Gramanet (Barcelona), Núria Parlon, ya ha dejado su puesto en la Ejecutiva de Pedro Sánchez, y otros alcaldes han mostrado su rotunda oposición al 155. Según fuentes cercanas al secretario general del PSOE, éste "aún no ha hablado" con Montilla.
El martes Iceta señaló que cuando muchos miembros del PSC advierten de los riesgos que tiene la aplicación del 155, "están diciendo la verdad y sería necio no hacerles caso"; aunque entiende que en política también hay que tomar decisiones que tienen respuesta ciudadana.
El PSOE andaluz apela a la disciplina de voto
Una postura que no está encontrando tanta comprensión en algunas federaciones socialistas. Ayer, el portavoz del Grupo Socialista en el Parlamento Andaluz, Mario Jiménez, señaló que su federación entiende que "habrá una propuesta por parte de la dirección del partido" y "todos los miembros del grupo tendrán que asumirla". "Si hay posiciones individuales, tendrán que responder quienes las mantengan al margen de la disciplina de voto del partido", sostuvo el portavoz andaluz.
En esa línea, aún sin hacer mención al caso de Montilla, el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, hizo hincapié en que el artículo 155 hay que aplicarlo no para convocar elecciones sino porque hay que derogar las normas anticonstitucionales que ha aprobado el Parlamento catalán.
Guerra da la "bienvenida al mundo de la responsabilidad" a Pedro Sánchez y dice no entender el misterio de Montilla negándose a revelar cuál será su voto mañana en el Senado
Y el más duro fue el ex vicesecretario general socialista Alfonso Guerra, muy enfrentado a la actual dirección, quien dio la "bienvenida al mundo de la responsabilidad" a Pedro Sánchez, por haber pasado de la estrategia del "no es no" a apoyar ahora al Gobierno en el conflicto catalán. Guerra dice no entender "el misterio" que mantiene José Montilla sobre lo que va a votar respecto al 155, y ha considerado que debería seguir la estrategia del partido al que pertenece.
"No entiendo por qué no dice lo que va a hacer. ¿A qué viene este misterio? La política se ha convertido casi en la cosa del corazón: que si se va a divorciar, que si no, que si van bien, que si no", ha comparado.
Respecto de la propuesta del líder del PSC, Miquel Iceta, de un Pacto de Estado para Cataluña para "resolver el problema de fondo", más allá de la aplicación del 155, Guerra cree que está "intentado mantener un equilibrio que, tal y como están las cosas, es muy difícil".
Mientras tanto, en el PSC sostienen que defenderán la vía del diálogo hasta el último minuto, aunque cada uno que pasa tienen menos esperanzas de que se abra camino. Los socialistas catalanes lamentaron profundamente la decisión de Puigdemont de no acudir al Senado y lo calificaron de un último portazo a la negociación.