Pedro Sánchez y Patxi López coinciden en algo: la secretaría general del PSOE necesita dedicación exclusiva y, por tanto, sería imprescindible que si Susana Díaz compite en las primarias de mayo, abandone antes la Junta de Andalucía. Estas son palabras mayores porque lo que se pondría en riesgo es la auténtica joya de la corona, algo que causa profundo repelús a los principales referentes del partido, el expresidente Felipe González entre ellos.
¿Cómo podemos arriesgarnos a perder una joya de la corona como Andalucía?, se preguntan en el PSOE
Las presiones para que Susana Díez dé un paso atrás cuando todavía ni siquiera lo ha dado hacia delante, están en marcha. Algunos de los que se embarcaron desde el minuto cero en la operación para descabalgar a Pedro Sánchez de la secretaría general y elevar a los altares a la presidenta andaluza, han dejado de confiar en ella. Todos, menos José Luis Rodríguez Zapatero, que sigue fiel a ella.
Según fuentes socialistas, hay un denominador común en todos los sectores enfrentados: la lideresa del sur ha manejado mal los tiempos. Si este sábado no anunciara, por fin, su candidatura, las interpretaciones de que ha decidido renunciar a competir en las primarias se extenderían por el conjunto de la organización, en un momento en el que todas las encuestas, sin excepción, reflejan que, de participar en esta carrera, estaría arrojándose a una piscina sin agua. La mayoría de los sondeos dan como ganador a Sánchez, seguido de López y de Díaz.
Con independencia de los pactos que pudieran alcanzarse después de las primarias de mayo, quedar en tercera posición dentro del PSOE sería un drama para Díaz, una mala noticia para Mariano Rajoy y una muy buena para el líder del PP andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla, con crecientes posibilidades de conseguir el Gobierno de la Junta en unas autonómicas anticipadas. Él mismo descartó ayer esta posibilidad con la boca pequeña durante un desayuno informativo celebrado en Madrid en el que Rajoy acusó a Susana Díaz de pensar solo en “atornillar” a su partido al poder en Andalucía.
Disparos contra la gestora
Sobre los planes de la presidenta andaluza circulan dos versiones. La de quienes consideran que carece de margen para tirar la toalla y la de los que la ven tan insegura y dubitativa que no creen que se atreva a dar el paso. “Después de haber embarcado en esta operación a empresarios, banqueros, expresidentes del Gobierno y barones territoriales, no pelear por la secretaría general sería una derrota sin paliativos por desistimiento”, dicen los primeros. “Susana no puede arriesgarse a ver como Sánchez consigue en Andalucía más del 30% de los apoyos. Ha jugado mal sus cartas desde el principio y lo mejor para ella sería una retirada discreta”, apuntan los segundos.
Pedro Sánchez y Patxi López defienden que Susana Díaz deje la Junta si decide competir en la carrera de las primarias
En este mar de incertidumbres, los sanchistas y los seguidores de Patxi López han comenzado a disparar directamente contra la gestora que preside el asturiano Javier Fernández. La acusan de trabajar sin ningún tipo de miramiento a favor del desembarco de la andaluza, contraviniendo los estatutos del partido y violentando a diario la neutralidad que debía ejercer en el proceso de primarias. El portavoz de esta gestora, Mario Jiménez, hombre de confianza de la lideresa, se decantó ayer porque su protectora compatibilice, si fuera el caso, la secretaría general con el Gobierno andaluz, algo que, en su opinión, encaja plenamente con la “cultura del PSOE”.