Es la catedral de la Cultura Pop. Ante ella se rinden varias generaciones. La Saga de la Guerra de las Galaxias, esa ciclópea historia en la que avanzamos hacia atrás. Cuando faltan apenas dos días para el estreno de la séptima entrega, El despertar de la fuerza, la prensa británica ha elogiado de forma unánime, calificándola de "un verdadero triunfo" y "un auténtico clásico". Los diarios Daily Telegraph, The Guardian y The Times han otorgado a la cinta de J.J. Abrams cinco estrellas y han destacado el papel del veterano Harrison Ford, que en este séptimo episodio ha vuelto a pilotar el mítico Halcón Milenario y a vestirse de Han Solo 32 años después.
El crítico del Daily Mirror asegura haber llorado varias veces mientras veía el filme; el Telegraph aseguró que se trataba de un triunfo, un clásico
Trabajar un clásico siempre supone un riesgo, y en este caso todavía más. En 1977 se estrenó la primera película, La guerra de las galaxias. Ésta correspondía a la cuarta entrega de la saga; las dos siguientes (que conformarían la trilogía central) se estrenaron en 1980 y en 1983. En 1986 la trilogía completa fue sometida a una mejora cinematográfica y exhibida nuevamente en las salas. La parte inicial de la saga, formada por tres nuevas películas se estrenaría en 1999 la primera, en 2002 la segunda y la tercera y última parte en 2005. Posteriormente, Lucas anunciaba su renuncia a completar el proyecto con tres nuevas entregas, tal como diseñó inicialmente la narración.
El despertar de la fuerza, conforma así la primera película de la tercera trilogía -que se completará en 2017 y 2019-. El Daily Mail se refirió a esta como "un triunfo de la fantasía y la película más emocionante de la franquicia". "Abrams y su equipo cogieron una franquicia desgastada y recuperaron su sentido de magia y de mito", publicó el Telegraph, cuyo crítico de cine reconoció haber "llorado tres veces durante la película". El Daily Mirror también elogió la cinta, de dos horas y cuarto de metraje, que "evoca las memorias mágicas del filme de 1977 'Episodio IV: una nueva esperanza' con mucho humor, acción, drama y corazón".
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No fue igual de entusiasta la prensa española, comenzando por el conocido crítico Carlos Boyero, quien incendió las redes sociales con la desafección de su crítica. "Es el séptimo episodio de Star Wars, el primero de la tercera trilogía de la saga, pero que en la realidad es la continuación de la primera, ya que la segunda contaba lo que había ocurrido antes de la primera. En fin, un poco de lío. Se titula El despertar de la Fuerza. Y todo mi respeto hacia los millones de fans que podrían resumir lo que significa el cine para ellos con cinco palabras: "La guerra de las galaxias”. Y más que el cine, para muchos también es una religión o el mito más amado. No es mi caso. Me divertí bastante con ella al principio (...) Me he entretenido moderadamente con este circo anfetamínico. Deseando que durara un poquito menos. Son mis gustos. Pero entiendo que para infinidad de espectadores esta película les regale el éxtasis".
Carlos Boyero manifestó que la película era aburrida y larga, e incluso objetó que el casting incluyese a un actor negro.
Ahí no quedó el asunto, en su reseña Boñero protesta por todo o casi todo, desde la repetición del imaginario hasta la inclusión de un actor negro. "Abusan de la repetición de una imaginería que no falla (ay, esa taberna poblada de bichos raros o el descarado parecido entre Yoda y Maz Kanata, o la inclusión del robot enano) e introducen a Rey, una chatarrera que lo hace bien, que va a dar mucho juego en la continuación, y a Finn, un personaje sin el menor interés al que interpreta horrorosamente un actor negro. Y cómo no, ahí está Han Solo, que ha envejecido muy bien, la princesa Leia, tan sosa como castigada y Luke Skywalker, que jamás despertó pasiones. Y dos villanos que no me convencen, que te hacen añorar la tenebrosa presencia de Darth Vader".
El conocido periodista y crítico Luis Martínez no fue mucho más entusiasta. "Fuera cinismos, la última entrega de 'Star wars' es básicamente un acto de rendición; un rito para confraternizar con cada una de las imágenes que compusieron el escenario de cualquier infancia, a cualquier edad; una vuelta al origen. Da lo mismo cuál de ellos", escribe. Titulada El placer de lo igual, su crónica aclara: "No esperen al Abrams que releyó enteramente el universo de Star Trek. Es más, éste es justo el contrario. Y, sin embargo, eso que parecen equivocaciones en este espacio y en este momento son logros. Lo que ha hecho el director es recomponer el tejido enfermo de la última trilogía para devolvernos el brillo del mito, la gracia tal vez de la infancia, el placer de volver a empuñar un sable láser".
El despertar de la fuerza, que se estrena el viernes en todo el mundo, tendrá su preestreno europeo esta noche en la céntrica plaza de Leicester Square de Londres con todas sus estrellas