A sus 75 años, el cineasta Fernando Colomo se encuentra en plena forma y sigue trabajando todo lo que puede en un oficio por el que siente devoción. Al igual que le ocurre a algunos habitantes de zonas rurales de Japón que cuentan con una alta esperanza de vida, la palabra jubilación, entendida como el gesto de "cruzarse de brazos" y despertarse "tarde", no entra en sus planes. Por ello, prefiere seguir la filosofía nipona y tener siempre "un objetivo", un "proyecto" y una "ilusión" que le permita levantarse y movilizarse .
"Mientras me dé la cabeza, lo que quiero es seguir trabajando de cualquiera de las maneras: como guionista, director o tramoyista", ha señalado el cineasta durante una entrevista concedida a Vozpópuli con motivo del estreno de Cuidado con lo que deseas, un cuento navideño protagonizado por Dani Rovira, Cecilia Suárez y José Sacristán, entre otros, que se estrena este viernes y del que es responsable, a pesar de confesar no ser "muy entusiasta" de estas fechas ni del "punto de hipocresía" que a su juicio destilan.
Sin embargo, tal y como ha confesado, el cine es su pasión y, además, como productor tiene que asumir los riesgos que supone y seguir trabajando. "Es una ocupación muy arriesgada. Como la mayoría de los productores me he arruinado varias veces, y uno tiene que seguir trabajando para intentar desarruinarse un poco", ha señalado respecto a las declaraciones que hizo hace varios años a los medios acerca del preocupante estado de sus finanzas.
En Cuidado con lo que deseas, hay algún otro cameo de actores que brillaron en otro tiempo, como Fernando Esteso y Willy Montesinos. En este sentido, y preguntado por cómo le afecta la nostalgia, el director de Bajarse al moro (1988) y Los años bárbaros (1998) ha señalado que intenta no echar la vista atrás porque supone "vivir de mentira". "Se reviven los momentos más dulce sy agradables y se olvidan los más difíciles. Es una pequeña trampa y prefiero seguir hacia adelante", sostiene.
Preguntado acerca de cómo se desenvuelve en una época en la que las plataformas parecen mandar, Colomo reconoce que "ha cambiado todo mucho" y que en la actualidad se hace cine "para las plataformas", algo que no ve "ni bueno ni malo". Lo que sí es cierto para el director es que "los medios de difusión van variando, pero algo no va a cambiar". "Necesitan a gente que cuente historias. Hay que ser flexible para adaptarse a los tiempos", ha señalado.
Vivimos unos tiempos difíciles para la creatividad: se hace mucho audiovisual pero quizás no haya la libertad suficiente para contar otro tipo de historias", reflexiona Colomo
¿Son estos tiempos favorables para que todos quienes tengan algo que decir puedan contar historias? "Lo veo más desfavorable que hace unos años, porque hay mucha petición de audiovisual pero entran en juego factores matemáticos, como los algoritmos. A lo mejor quieres contar con determinados actores, pero el algoritmo dice que no tienen muchos seguidores en Instagram. Vivimos unos tiempos difíciles para la creatividad: se hace mucho audiovisual pero quizás no haya la libertad suficiente para contar otro tipo de historias", reflexiona Colomo.
En la película que estrena este viernes, además de presentar un cuento navideño, también aborda la crisis de pareja y el matrimonio. En su anterior película, Poliamor para principiantes -estrenada el pasado mes de mayo- abordaba los nuevos modelos de compañía. "El concepto tradicional de pareja, de encontrar a la media naranja y de que eres un ser infeliz si no has encontrado a tu media naranja está en crisis, es una cosa bastante equívoca. No creo que te tengas que casar para toda la vida. Estamos en una sociedad que está en evolución, no podemos seguir pensando como en el siglo XIX", apunta.
Colomo: arquitecto y aspirante político
Fernando Colomo (Madrid, 1946) se licenció en la Escuela Superior Técnica de Arquitectura de Madrid (ESTAM) y aquella formación como arquitecto le ha servido en su profesión. "Tiene muchos paralelismos con el cine, en la forma de construir un guion o la estructura, es una disciplina bastante exigente que puedes aplicar a otras especialidades", cuenta. No obstante, confiesa que su primera inquietud fue estudiar Bellas Artes -ya que hasta los 21 años no podía ingresar en la Escuela Oficial de Cine- a lo que se negó su padre, que le exigió estudiar "una carrera seria".
Otro dato curioso en la biografía de Colomo es que en las elecciones generales de abril de 2019 se presentó como cabeza de lista de la coalición Recortes Cero-Grupo Verde para el Senado, un coqueteo con la política que nació por una motivación personal. "De vez en cuando hay que implicarse en ciertas cosas", ha señalado, aunque asegura que no se va a volver a presentar como candidato porque no se ve como "profesional de la política".
