Un nueva edición del Festival de Cannes llega a su fin con la entrega este sábado 25 de mayo del máximo galardón, la Palma de Oro, que el pasado año fue para la francesa Anatomía de una caída, de Justine Triet, y que meses más tarde logró varias nominaciones y un premio en los Oscar. La noticia que llega hoy será, pues, un avance de lo que podrá verse en la próxima temporada de premios, si se tiene en cuenta la trascendencia que tiene en los últimos años lo que sucede en los festivales como Cannes o Venecia.
En esta ocasión, según cuentan los cronistas que han podido asistir a la cobertura de este certamen, no ha faltado de nada: ni noticias extracinematográficas relacionadas con el 'Me Too' en la industria francesa, ni películas atípicas e inesperadas por su riesgo estético y en su contenido, ni acontecimientos de gran envergadura como el estreno del megaproyecto de Francis Ford Coppola, que ha presentado en la croisette a sus 85 años, ni el homenaje a la mejor actriz viva, Meryl Streep, ni tampoco buenas noticias para el cine español, tras el premio que Jonás Trueba ha conseguido con su película Volveréis. En Vozpópuli hacemos balance de una de las ediciones más eclécticas y brillantes que se recuerdan.
Vayamos por partes. El Festival de Cannes arrancó el pasado 14 de mayo con una gala inaugural en la que se proyectó Le Deuxième Acte, del francés Quentin Dupieux, uno de los directores galos más interesantes del momento, capaz de hablar con ligereza, locura y sin aparente importancia. Aquella noche, Meryl Streep recibió la Palma de Oro Honorífica de manos de la intérprete francesa Juliette Binoche, que no pudo reprimir las lágrimas al hacerle entrega del galardón.
La emoción no se detuvo ahí, ya que la gala contó con otro momento emotivo cuando a francesa Zaho de Sagazan interpretó en directo la canción Modern Love, de David Bowie, para rendir homenaje a la presidenta del jurado de la sección oficial de Cannes, Greta Gerwig. La directora de Barbie, también actriz, se movió al ritmo de esta canción en la película Frances Ha (2012), dirigida por el cineasta y pareja de Gerwig, Noah Baumbach.
Aunque el festival intentó poner el cine en el centro, tal y como señaló en rueda de prensa el director del festival, Thierry Fremaux, no consiguió huir de las polémicas relacionadas con el 'Me Too' que surgieron los primeros días y que aterrizaron en el certamen. En la misma jornada inaugural trascendió en la prensa el testimonio de nueve mujeres que acusaron al productor Alain Sarde de violaciones, abuso y acoso sexual durante los años 80 y 90, al tiempo que salió a la luz el manifiesto que varias actrices firmaron para exigir una ley contra la violencia sexual.
El certamen francés tampoco consiguió huir de las polémicas que surgieron en su organización, al tener que afrontar una huelga de los trabajadores, que se movilizaron para protestar por sus condiciones laborales en el certamen. No fue hasta pasados unos días cuando el agua volvió a su cauce y, entonces sí, el cine se colocó en el centro. No vino mal un poco de agitación para hacer saber al mundo lo que ocurría en la croisette, así que, por mucha llamada de atención a lo importante, lo cierto es que el ruido mediático nunca viene mal a un festival que, buscado o no, siempre sale ganando con las polémicas.
Cannes se rinde a Trueba
Entre los hitos de esta edición destaca la presentación mundial de Megalópolis, el nuevo proyecto de Francis Ford Coppola. Según cuentan quienes lo han visto, es abrumador y colosal, pero también aburrido, excesivo y disparatado, unos adjetivos que ganan peso si se tiene en cuenta que esta ha sido la obsesión del genio del cine durante los últimos años. Adam Driver, Giancarlo Esposito, Nathalie Emmanuel o Aubrey Plaza componen el elenco de esta película, que ha encontrado distribuidor en España, donde no se estrenará antes de final de año.
El Festival de Cannes ha sido también el escenario en el que se ha presentado Furiosa: de la saga Mad Max, la nueva película del australiano George Miller, en la que ha confeccionado una precuela para su anterior película, Mad Max: furia en la carretera (2015), que tantas alegrías le dio (cinco premios Oscar y la presidencia en el jurado de Cannes). En esta ocasión, aunque no ha generado un entusiasmo similar al de aquella producción, lo cierto es que el aplauso ha sido unánime para una película que acaba de llegar a los cines este fin de semana.
Más allá de los elogios hacia las películas de Jacques Audiard (el musical Emilia Pérez), Sean Baker (Anora), Leos Carax (C'est pas mois), o Coralie Fargeat (The Substance), a este lado de los Pirineos la noticia indiscutible es el triunfo de Jonás Trueba y su película Volveréis, ganadora en la Quincena de Cineastas de Cannes, esa sección en la que tienen cabida propuestas más alternativas y arriesgadas.
Con este reconocimiento (que se suma al que logró Elena Martín en 2023 con Creatura), Trueba se consagra como uno de los cineastas españoles más valorados en territorio francés. Sin ir más lejos, su película La virgen de agosto (2019) no solo alcanzó mejores cifras de taquilla en el país galo que en España, sino que la prestigiosa revista Cahiers du Cinema la colocó entre las mejores diez películas internacionales de aquel año y tuvo hueco entre los premios Cesar. Aquí, sin embargo, no obtuvo ninguna nominación en los Goya. La película llega a los cines españoles el 30 de agosto y entonces se verá si en su caso él no es profeta en su tierra.
Sin_Perdon
La política y la "cultura" siempre tan entrelazados, tal y como le gusta a esos activistas de la "gauche divine". Acabo de ver el trailer de "Megalópolis"... Demasiados efectos especiales, demasiada estridencia, demasiada ampulosidad,... todo lo que parece esconder una ausencia clamorosa de guion, porque realmente en el trailer no hay manera de ver de qué va ese experimento. Y es que a veces ni los genios saben cuando deben retirarse.