La hegemoníam de la música popular anglosajona ya es un mal recuerdo, que se fue dejando poco a poco atrás desde el glorioso Gasolina de Daddy Yankee en 2004. Los jóvenes superventas en nuestro idioma dominan el planeta pop y grababn discos que suenan a clásicos, repaldados por giras mundiales que este año desembarcaran en el recién remozado Santiago Bernabéu y otros coliseos de ese tamaño en todo el planeta.

Mañana será bonito (Bichota season), de Karol G

Muchos todavía no se dan cuenta, pero estamos viviendo una edad de oro de la música latina, quizá la más brillante de todas. Parte de la responsabilidad, sin duda, es de la colombiana Carolina Giraldo Navarro, más conocida como Karol G, que ha entado en la treintena más inspirada que nunca. El nivel de la música urbana en nuestro idioma es tan alto que Mañana será bonito (Bichota season) no impresiona ni descoloca, pero contiene temazos enormes para levantar cualquier pista de baile. Hoy mantener el voltaje ya es triunfar.

Génesis, de Peso Pluma

Peso Pluma es el nombre artístico de Hassan Emilio Kabande Laija, un joven y pujante músico mexicano. Su propuesta consiste en una mezcla de tradición y modernidad: compone corridos tumbados, donde mezcla los formatos tradicionales de su país, con sus trombones y tubas, con los recursos de la música urbana, tanto del ya clásico hip-hop como el obsesivo trap.Comenzó a pegar fuerte en 2022 y, en un corto periodo de tiempo, ha llegado a superar a Bad Bunny en la lista Billboard, la lists estadounidebse de ventas. Su canción más escuchada en la plataforma es “Ella Baila Sola” con 5 millones 127 millones de clics. Bizarrap le dedicó su sesión #55, que ya supera ampliamente los 20 millones.

PO2054AZ, de Sen Senra

Junto con C.Tangana y Alizzz, forma la santísima trinidad de la renovación del pop español actual. Su especialidad ha sido redefinir el género de la balada, haciéndolo sonar fresco una vez más, ayudado por colaboraciones de lujo como las de Tainy, Sky Rompiendo, Buscapé e Ian Isiah.  La sensación es la de estar ante un artista que compone desde una cima de inspiración: “Siento que ahora mismo tengo en mis manos el conocimiento que quería tener, que es llevar los temas a un nivel del que ahora soy capaz, el desarrollo de las canciones también. Creo y espero que todo sea un pico hacia arriba”, ha explicado a Rolling Stone.

Nata Montana, de Natanael Cano

Si hay una verdad que siempre se dice acerca de Natanael Cano es que es uno de los personajes clave para entender el sonido de la música mexicana que se convirtió en hegemonía en 2023. Desde hace años pareciera que su cruzada –esa de pulir el sonido de las cuerdas y las historias de esa vida recia (como decía Chalino)– ha sido un constante camino de éxitos. Con Nata Montana logró encontrar su centro, más cercano a la meticulosidad de alguien como Ariel Camacho que a cualquier otro ídolo de los corridos que se le quiera imputar. Es su disco menos agresivo y el más introspectivo, más preocupado por la delicadeza de su sonido que por el impacto de sus manifiestos. A Natanael Cano le hacía falta un momento de armonía, de paz y aquí es en donde vino a encontrarlo.

LVUE…vive la tuya, no la mía, de Myke Towers

Se trata de todo un tour de forcé: el álbum cuenta con 22 canciones inéditas más el éxito “Lala”, sobre los placeres de ddar sexo oral a una mujer, que acumula más de 614,9 millones de reproducciones en Spotify. ‘LVEU: Vive la tuya... no la mía’ es el quinto álbum de estudio de Towers y el segundo que lanza en 2023, tras ‘La vida es una’, que publicó en marzo pasado. Towers brilla en gñenros como el reguetón con ‘La falda’, el merengue “La capi” y también en otras como ‘La ronda’, una mezcla de ritmos cubanos con un toque urbano. ‘Esa nena’ que muestra un número de hip hop atemporal.

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