El corazón es el motor de nuestro cuerpo. Por ello es el músculo más fuerte que tenemos sin el que, lógicamente, no podríamos vivir. Mantenerlo sano y fuerte es imprescindible también para gozar de una buena calidad de vida. Algo por lo que desde hace años trabajan organismos y especialistas que tienen claras las claves para conseguirlo evitando así enfermedades.

Según la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cardiovasculares, relacionadas con el corazón y los vasos sanguíneos, son la principal causa de defunción en el mundo cobrándose cerca de 18 millones de vidas cada año. Aunque en su mayoría afectan a las personas mayores, la OMS calcula que una tercera parte de esas defunciones ocurren de manera prematura en personas menores de 70 años.

Los 10 consejos que debes seguir para mantener tu corazón sano y fuerte

Afortunadamente, tal y como confirma la OMS, las enfermedades relacionadas con el corazón se pueden evitar y reducir de manera notable con unos buenos hábitos de vida. Por ello, la Federación Mundial del Corazón (‘World Heart Federation’) se ha marcado como objetivo que en el año 2025 hayamos conseguido disminuir en un 25 por ciento el número de muertes prematuras causadas por las enfermedades cardiovasculares.

Así, desde la Fundación Española del Corazón, nos desvelan las diez claves imprescindibles para disfrutar de una buena salud cardiovascular. Unos sencillos hábitos que instaurar en nuestro día a día para ayudar al buen funcionamiento del corazón.

Seguir una alimentación saludable

Mantener una alimentación sana y variada, que incluya todos los nutrientes que el organismo necesita para su buen funcionamiento es una de las claves más importantes para gozar de una buena salud. Y también para controlar los factores de riesgo relacionados con las enfermedades cardiovasculares.

Practicar ejercicio habitualmente

Entre los numerosos riesgos del sedentarismo se encuentran la aparición de patologías como el sobrepeso, la hipertensión, la diabetes o la hipercolesterolemia, todas relacionadas con las enfermedades cardiovasculares. Para evitarlas, se recomienda practicar deporte de manera  habitual. “Como mínimo 150 minutos semanales de actividad física aeróbica de intensidad moderada o 75 minutos de actividad intensa” señalan desde la Fundación Española del Corazón.

Limitar el consumo de grasas trans

Como comentábamos, llevar una dieta saludables es importante, como lo es limitar lo máximo posible el consumo de productos industriales como las galletas, la bollería industrial, los snacks, los batidos y los alimentos precocinados, que suelen contener grasas trans que aumentan los niveles de colesterol LDL (colesterol malo) y disminuyen el colesterol HDL (colesterol bueno).

Controlar la tensión

Uno de los mayores factores de riesgo cardiovascular es la hipertensión. La presión arterial alta ofrece una mayor resistencia para el corazón, por lo que esta aumenta la masa muscular para hacer frente al sobreesfuerzo. Algo que puede producir insuficiencia coronaria y angina de pecho. Por ello, es importante controlar la tensión y seguir las recomendaciones médicas en caso de tenerla alta.

Vigilar los niveles de colesterol

Tener los niveles de colesterol alto puede provocar la formación de placas de ateroma que lleven al ensanchamiento de las arterias obstruyéndolas y produciendo desde una angina hasta un infarto o un accidente cerebrovascular. Por ello, es importante tener bajo control el colesterol.

Descansar las horas necesarias

La falta de sueño y descanso puede provocar numerosas afecciones. Entre ellas, enfermedades cardiovasculares. Así lo confirma un estudio publicado en ‘European Journal of Preventive Cardiology’ que asegura que las personas que tienen buenos hábitos de vida y duermen un mínimo de siete horas al día reducen hasta en un 65 por ciento el riesgo de sufrir dichas enfermedades.

Evitar el estrés

El estrés, y las tensiones que este ocasiona al organismo, son considerados un importante factor que perjudica a la salud del corazón. Por ello, es necesario evitar situaciones de ansiedad o angustia. El deporte y la meditación se han convertido en dos grandes aliados para mantenerlo a raya.

No fumar

Conscientes de los numerosos problemas para la salud que ocasiona el tabaquismo, hay que recordar que fumar aumenta el riesgo de padecer un infarto agudo de miocardio.

Controlar el consumo de alcohol

Según apunta la FEC, la ingesta excesiva de bebidas alcohólicas puede provocar una aceleración del ritmo cardiaco, e incluso se asocia al desarrollo de disfunción ventricular y la génesis de arritmias.

Mantener contacto con tu médico

Hacerse revisiones médicas periódicas es importante para prevenir la aparición de enfermedades, sobre todo a partir de cierta edad. Pero además, hablar con tu médico y consultarle cualquier tipo de dudas sobre tu salud te ayudará a conocer los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares.

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