Bienestar

Que ser padre no te robe la pasión: cómo puede mantener la chispa una pareja con hijos

Tener pareja estable y con hijos en una época en la que los amores son cada vez más efímeros y hasta las relaciones más sólidas terminan por derrumbarse, nos asaltan

  • Imagen de Historia de un matrimonio

Tener pareja estable y con hijos en una época en la que los amores son cada vez más efímeros y hasta las relaciones más sólidas terminan por derrumbarse, nos asaltan las dudas y uno se pregunta si el amor existe o si una relación puede durar toda la vida, más cuando hay niños de por medio.

La llegada de los hijos suele ser un punto de inflexión para muchas parejas, que deciden tomar rumbos separados y cuidar al niño, o niños, desde casas separadas.

Muchas personas relegan del todo a su pareja en pos de sus hijos. Es evidente que el amor a los segundos no es comparable con el de un marido o una mujer, pero es precisamente por ello por lo que hay que cuidarlo más, porque no es incondicional.

Que ser padre no te robe la pasión: cómo puede mantener la chispa una pareja con hijos

Hoy en Vozpópuli, aprovechando el Día del Padre, que se celebra este 19 de marzo, vamos a proponerte una serie de técnicas con las que podrás mantener viva la pasión con la pareja aun cuando los hijos ya han llegado a vuestras vidas

Más sexo

El sexo es un perfecto indicador del estado de una relación. El estrés y los hijos hacen que apenas reservamos tiempo de calidad para estar con nuestra pareja. Según el Barómetro de Control, de hecho, el 29,2% de los españoles tiene sexo una vez a la semana, cuando al 50,4% le gustaría hacerlo cada dos o tres días, e incluso un 24,3% lo querría una vez al día. Querer es poder, así que organiza tu semana para tener momentos en pareja y verás como casi sin pretenderlo todo empieza a fluir.

Más detalles

El romanticismo y los detalles van brillando por su ausencia según van pasando los años en una relación. Ya ni se da cuenta de que te has puesto mechas o no te dice lo sexy que estás recién afeitadito. El amor está en los detalles, por eso hay que cuidarlo poniendo especial atención en ellos.

Muchas veces, son los pequeños gestos los que marcan la diferencia en una relación, cosas como sorprender a tu pareja llevándole el desayuno a la cama pueden convertirse en una experiencia diferencial. U organizar citas a solas de vez en cuando, salidas sin los niños... cualquier cosa que os haga ser solo dos aunque sea por unas horas.

Huir de la rutina en la intimidad

Las parejas estables con hijos tienden a entrar en rutinas en las que el sexo pasa a un segundo plano. Tener relaciones se vuelve algo metódico y poco original, cuando las hay, y con el tiempo se terminan por perder las ganas. 

Ya sea en el sexo o en todo lo demás (más sexo oral, más juegos, más ver porno en pareja...), hacer cosas nuevas y tener la iniciativa prende la ilusión otra vez, y recuerda a ambos por qué se siguen aguantando después de todo.

Más cariños y besos porque sí

Cuando estamos muy enamorados no podemos despegarnos de la otra persona. La miramos, observamos, tocamos, besamos... Una pasión que se va evaporando cuando lo conocido se convierte en rutinario. Y es normal, ojo, pero no hacer ningún cariñito a nuestra pareja va convirtiéndonos solo en "madre" y "padre", y no en el amante fogoso y pasional que un día fuimos.

Al respecto, una encuesta realizada por Ashley Madison entre 1.956 personas, determinó qué el 75% de los hombres encuestados y el 44% de las mujeres eligieron el “contacto físico” como forma preferida para recibir amor. Fue la opción ganadora, así que, ante la duda, déjate de palabras vacías y toquetea más.

No hablar todo el rato de los hijos

Suele ocurrir, sobre todo, cuando los niños son pequeños. Al final, entre el trabajo, las tareas del hogar y cuidarles, uno no tiene apenas nada interesante que contarle a su pareja. Es entonces cuando los temas de conversación pasan a ser, siempre, los hijos. Esto, como hemos dicho en el punto anterior, es del todo un error, pues en una relación debe haber espacio para la individualidad de cada uno y de la pareja en sí, aunque haya niños en el hogar.

Reconocer lo afortunado que eres

Ya seas padre o madre, debes recordar que es una suerte la familia que has creado. La pareja que tienes, y con la que has traído al mundo a otros seres humanos. Es la mayor prueba de amor que hay. Por eso, no debes dejarte ir y has de mantener viva la pasión. No dejes que esa familia se rompa por no haber cuidado la relación todo lo que hubieras debido. Mira a tu alrededor y siéntete feliz, pues, aunque ahora te pueda parecer, en ocasiones, una carga, es lo más bonito que te puede dar este mundo.

Y esto es todo. Sólo nos queda felicitar a todos los padres y desear a todos un bellísimo día.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli