Cerca de tres millones de personas padecen osteoporosis en España, principalmente mujeres a partir de la menopausia. Una cifra que fuera de nuestras fronteras aumenta hasta los 200 millones, tal y como señala la Fundación Internacional de Osteoporosis.
Según Quirónsalud, la osteoporosis es una enfermedad “que produce una disminución de la densidad ósea, lo que aumenta la fragilidad de los huesos y el riesgo de fracturas, especialmente en la columna vertebral, caderas y muñecas. Esas fracturas pueden producir dolor crónico, limitaciones físicas, pérdida de independencia y disminución de la calidad de vida”.
La osteoporosis es una enfermedad silenciosa cuyos síntomas suelen pasar desapercibidos en las primeras etapas, lo que hace importante prestar atención a ciertos signos de advertencia. Según el doctor Juan Carlos Nieto, reumatólogo del Hospital Ruber Internacional, estos síntomas pueden incluir dolor óseo, pérdida de estatura gradual, postura encorvada y aumento del riesgo de fracturas incluso con lesiones menores. Unos signos ante los que es importante consultar con un médico para un diagnóstico y un tratamiento adecuado.
Tal y como señalan los expertos, es fundamental concienciar a la sociedad sobre el riesgo de esta enfermedad y sus consecuencias para la salud y el bienestar. Y por ello, la prevención es un factor clave para la osteoporosis.
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Los alimentos recomendados para prevenir la osteoporosis
Para mantener una buena salud ósea es importante prestar atención a la alimentación. Existen numerosos alimentos que, gracias a sus propiedades nutricionales nos ayudan a prevenir la osteoporosis y el desarrollo de fracturas. Y no solo ingredientes con un alto contenido en calcio, también con otros minerales y vitaminas.
El calcio es el nutriente más conocido en relación a los huesos, y por eso no puede faltar en una dieta para la prevención de la osteoporosis. Además de la leche y derivados como el yogur y el queso, entre los alimentos ricos en este mineral encontramos las sardinas en aceite, las almendras, las gambas y langostinos, o los garbanzos.
Según los estudios, la vitamina C también puede ayudar a la osteoporosis. Y no solo porque acelera la producción de osteoblastos, un tipo de células formadoras de los huesos, además, su efecto antioxidante puede ayudar a proteger los huesos de un daño mayor. Por eso, no pueden faltar en tu dieta frutas y verduras ricas en esta vitamina como el brócoli, los pimientos, la coliflor, la frambuesa, la naranja, el kiwi o las espinacas.
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El pescado también es un gran aliado contra la osteoporosis. Es el caso del salmón, el atún o el arenque, que además de ofrecer numerosos nutrientes, son ricos en vitamina D, que ayuda al organismo a absorber el calcio de manera más eficaz, y en ácidos grasos Omega 3, que aumenta la densidad ósea y reduce el riesgo de fracturas.
La vitamina K también es un nutriente que ayuda a la mantener la salud ósea. Y es que activa las proteínas implicadas en la formación de los huesos. Entre los alimentos ricos en este nutriente se encuentran verduras de hoja verde como la col, la espinaca o la acelga.
Otros alimentos que no pueden faltar en nuestra dieta son las semillas y frutos secos. Además de ofrecer numerosos beneficios para la salud, contienen magnesio, un mineral que ayuda a aumentar la densidad ósea, y zinc, que ayuda al crecimiento de los huesos y previene las fracturas. Por eso, los expertos recomiendan consumir a diario ingredientes como las semillas de lino, de sésamo de girasol, las almendras o los piñones.
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