Como adelantó Vozpópuli el pasado jueves, la Federación Española de Fútbol recibió la visita de los auditores enviados por el Consejo Superior de Deportes en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Finalmente fue ayer, en lugar del pasado viernes, después de que se aplazase la misma la pasada semana. La causa es la investigación que llevarán a cabo para estudiar supuestas irregularidades de las cuentas de Villar a través de los denominados expedientes de revisión financiera limitada. Estos se centran en investigar operaciones realizadas en diferentes ámbitos, entre otros con sus Fundaciones, de cuyos destinos existen algunos interrogantes, lo que le permite acceder a las facturas de ambos organismos.
El expediente consta de siete puntos, entre los que se incluye la rescisión del contrato con Santa Mónica, que les supuso a la RFEF un coste cercano a los cinco millones de euros. Además se investiga la utilización de divisas en determinadas transacciones. Eso coincidiría con el contenido de la querella interpuesta por Javier Tebas, que fue archivada por la Audiencia Provincial en su día. En este caso, Villar no tendría nada de que preocuparse, puesto que ya ha pasado la revisión judicial de esas cuentas, que el juez estimó que no presentaban irregularidades.
Se espera la respuesta de Villar al requerimiento del CSD, con cuyo dirigente, el secretario de Estado para el Deporte, libra un enfrentamiento desde hace meses. La auditora que se está encargando de este expediente es BDO Auditoria, que trabaja habitualmente con el Consejo. Lo que está aún en el aire es el requerimiento a Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español. En un primer momento había intención de cursar otra auditoría a Blanco, con la posterior apertura de expediente, en caso de no cumplir satisfactoriamente las exigencias del CSD. En las próximas horas se conocerán más detalles al respecto.