Llega el año 2017, un año en el que el deporte español tiene ‘deberes’ importantes que sacar adelante. El hombre elegido para llevar a cabo esa tarea es José Ramón Lete, recientemente nombrado presidente del Consejo Superior de Deportes en sustitución de Miguel Cardenal.
Si el bilbaíno sacó adelante temas importantes como recortar la deuda del fútbol o aprobar normas estrictas de buena gobernanza en unas federaciones que habían sumido al deporte en la quiebra económica, ahora le toca al donostiarra superar otros objetivos no menos importantes.
Para empezar debe hacerse cargo de renovar una legislación sobre dopaje con 26 años de antigüedad. España está obligada a adecuar la ley de dopaje al Código de la Agencia Mundial (AMA), renovando una ley del Deporte que data del año 1990. En un momento dado se contempló modificar el contenido de la misma, cosa que no se concretó. Después la interinidad del Gobierno durante un año impidió modificar la ley, lo que provocó la suspensión del laboratorio de Madrid desde el pasado mes de junio. La AMA notificó el pasado 19 de marzo a la agencia española (AEPSAD) que el laboratorio no cumple la normativa, aunque la adecuación del texto será un mero trámite. España sigue siendo sospechosa habitual en tema de dopaje por escándalos como la Operación Puerto, la Operación Galgo o la Operación Grial.
Después de adecuar la contabilidad de las federaciones gobernadas por auténticos ‘delincuentes’ que amontonan demandas de fraude durante sus gestiones, parece que por fin las federaciones tienen más que ver con los deportistas que con sus dirigentes. Lo cual es una gran noticia para nuestro deporte.
Precisamente esas federaciones esperan como agua de mayo la aprobación de un nuevo plan ADO para Tokio 2020. Lete tiene que reanimar el programa ADO y ADOP (paralímpico) junto al Comité Olímpico Español (COE) y RTVE, teniendo en cuenta que la televisión público se ha quedado sin los derechos de los Juegos, adquiridos por Discovery.
El ADO ha contado en el ciclo de Río de Janeiro con trece empresas que aportaron más de 22 millones de euros con becas en el último año para 191 deportistas. El resultado ha sido de 17 medallas en los JJOO y 31 de los paralímpicos. El listón está alto, en medio de un país en crisis con la población muy castigada por la recesión.
Mujeres y ley de mecenazgo
A este respecto Lete ha defendido un "modelo mixto de financiación, aunque se debe "hacer un esfuerzo para captar más fondos privados. Tenemos una ley de mecenazgo que no es mala, pero quizá insuficiente, y uno de los instrumentos más generosos es la declaración de excepcional interés público, que tiene una serie de beneficios fiscales. Tenemos diputaciones que invierten mucho, la administración autonómica y la estatal; ahora, bienvenida la aportación privada que nos viene muy bien para abordar otros proyectos”.
A eso se suma la obligatoria exigencia de dar más visibilidad a un deporte femenino que está cosechando mejores resultados que el masculino. El deporte debe servir de herramienta normalizadora para igualar el rol de las mujeres y los hombres, más aún ahora que ellas están tirando del carro en grandes eventos como los JJOO.
Entre las otras tareas aparece arreglar el tema de la falta de transparencia en la financiación de la la Federación Española de Fútbol (RFEF) de Ángel María Villar, el problema de los ascensos en la ACB o la mejora de las relaciones entre el presidente del CSD y el del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, con quien Cardenal no empatizó.
