A menos de tres horas para el derbi copero del Bernabéu, saltó la noticia. Gareth Bale no jugará esta noche ante el Atlético de Madrid. El galés no se ha recuperado totalmente de sus problemas físicos en el gemelo izquierdo y los doctores del club blanco han decidido que lo mejor era que abandonase la concentración.
Lo más sorprendente es que Carlo Ancelotti aseguró este martes en sala de prensa que el galés estaba "disponible" para el partido de Copa. Sin embargo, un retroceso en su estado físico le habría obligado a ser descartado a última hora por el técnico italiano. Según fuentes del club madridista, Bale no jugará "por precaución".
Cabe recordar que Bale había vuelto a entrenarse con el grupo esta semana tras lesionarse en el partido ante el Granada. Ancelotti señaló que el cambio se debió a "un golpe". Pese a sus palabras no quiso hablar de problemas mayores y aseguró que "no es una lesión, es una carga que le ha desequilibrado un poco. No tendrá problema para el próximo partido".
El presunto golpe llevó a Bale a entrenarse en solitario en el gimnasio. Se trata del tercer gran parón del jugador que ha visto interrumpida su progresión al menos en tres ocasiones por periodos de tiempo importantes. Ya estuvo de baja más de lo esperado por un golpe foruito con Arbeloa, que le dejó fuera del grupo casi un mes.
Este es el décimo partido en el que se ausenta desde que firmó por el Madrid a finales de agosto. El galés sólo ha disputado el 51% de los minutos posibles (1.434 de 2.790).
Lo que el Real Madrid pretende es que esté en perfectas condiciones para reaparecer este sábado en el partido de Liga ante el Villarreal. De momento, ante el Atlético, su plaza en el once será ocupada de nuevo por Jesé.
